LA VIGA EN EL OJO AJENO

300 mil dólares ha invertido Colombia en campaña contra el narcotráfico en los Estados Unidos.

21 de noviembre de 1988

A primera vista, el aviso parecía otro más de los cientos que han aparecido durante la campaña electoral para la presidencia de los Estados Unidos. Sin embargo, los sorprendidos lectores de los diarios The New York Times, The Washington Post y el Wall Streef Journal se encontraron con que el que apareció un día después del último debate Bush-Dukakis, no buscaba resaltar las cualidades de uno u otro candidato, sino hacer un llamado a los aspirantes para que pusieran todo su empeño en la lucha contra el consumo de drogas en su país. El "gancho" era bien original: se les decía a los candidatos que sobre el problema de la droga no podía haber debate. El aviso había sido ordenado por el gobierno colombiano.
No era la primera vez que el público norteamericano se encontraba con mensajes de este estilo. En el pasado mes de junio, cuando el presidente Barco planeaba realizar una visita a los Estados Unidos, el gobierno nacional decidió lanzar una gran ofensiva publicitaria, para que coincidiera con su estadía en ese país. La iniciativa obedeció a que el tema del narcotráfico era punto central en la agenda presidencial. Barco quería demostrar que el Estado colombiano está comprometido en una guerra a muerte contra el tráfico ilegal de drogas y que el fenómeno es el resultado de la fuerte demanda de los consumidores gringos.
La cancelación de la visita de Barco a los Estados Unidos no afectó la campaña, que se llevó a cabo en el mes de junio, cuando el canciller Julio Londoño fue en remplazo del Presidente. Durante una semana apareció en canales regionales de Nueva York, Washington y otras ciudades de la costa este, una cuña de 30 segundos de duración en la que, a medida que pasaba una lista con los nombres de personas asesinadas por el narcotráfico, se observaban imágenes de atentados y entierros. Eran seis diarias que se pasaban en noticieros y programas institucionales de las cadenas televisivas ABC y CBS. Al mismo tiempo, aunque no diariamente, aparecieron avisos de página en el New York Times, el Washington Post y el Wall Street Journal. En unos aparecía la misma lista de muertos del comercial de televisión, y en otros una foto del entierro de Guillermo Cano con una leyenda en la que decía que la guerra contra el narcotráfico es más que una guerra de palabras.
Una campaña de esta naturaleza especialmente en un país como los Estados Unidos, es bastante costosa. Por eso el gobierno colombiano, que no contaba con los recursos necesarios, obtuvo el respaldo de varias firmas colombianas privadas y oficiales que tienen presencia en el mercado norteamericano y que han visto afectados sus intereses por las medidas represivas tomadas por parte de las autoridades estadinenses. Según lo explicó a SEMANA el consejero presidencial Rodrigo Pardo, "hasta el momento se han invertido cerca de medio millón de dólares en este proyecto, que ha contado con la asesoría de la agencia de publicidad Sawyer y Miller". Pero es posible que la campaña alcance los 2 millones de dólares en lo que falta de gobierno. El interés de la actual administración en esta campaña ha sido tal, que el Presidente mismo ha metido mano en el asunto y en más de una ocasión ha corregido, de su puño y letra, copias de los artes finales de los avisos, enviados a Palacio por telefax.
Otro de los puntos que quiere resaltar la campaña es el que tiene que ver con la imagen de "país tomado por el narcotráfico", que se tiene de Colombia en los Estados Unidos. Según Pardo, "se busca que los norteamericanos, especialmente las personas que crean opinión, entiendan que los muertos que ha puesto el país en la lucha contra el narcotráfico no indican que el país esté tomado por ese fenómeno, sino que son la prueba de que se está luchando. Si hay muertos es porque hay gente que se opone a ese delito".
Por el momento, los 200 mil dólares que cuesta la semana de propaganda en los canales locales y los 30 mil que cuesta la página en los periódicos, parecen haber dado resultado. En junio pasado, los noticieros nacionales de la CBS y la ABC recogieron el hecho en sus emisiones para todo el país y hablaron sobre la labor que se hace en Colombia contra el tráfico de drogas. El pasado viernes, el programa "Buenos días América" de la ABC se refirió al aviso publicado ese día y le dio despliegue nacional. En los círculos oficiales norteamericanos se ha comentado favorablemente, aunque de manera informal, esta avanzada publicitaria y el presidente Barco ha debido quitarle algo de tiempo a sus labores para contestar las cartas de los lectores y televidentes gringos, en las que reconocen que la única ley que no podrán violar los narcotraficantes es la económica: sin demanda no hay oferta.