RELACIONES

Máximo 150

En Facebook y otras redes sociales se está confirmando aquello de que ‘amigo de muchos, amigo de nadie’.

27 de junio de 2010

Son muy pocos los que conocen verdaderamente a todos sus contactos en redes sociales como Facebook. Aun así, son muchos los que siguen aceptando contactos que no conocen y que no les interesan, como si Facebook fuera un concurso de popularidad.

Y es que para ellos lo es y por eso aceptan cuanta solicitud les llega. Pero la realidad se ha encargado de demostrar que la cantidad de amigos virtuales no es garantía de popularidad y mucho menos de relaciones interpersonales significativas o enriquecedoras. De hecho, existe una teoría conocida como el Número de Dunbar, según la cual hay un límite de individuos con los cuales se puede mantener una relación estable. Según Robin Dunbar, profesor de la Universidad de Oxford y autor de esta teoría, el número máximo es 150. De acuerdo con sus investigaciones, esa limitación nace en una zona del cerebro conocida como el neocórtex, que juega un importante papel en funciones como el pensamiento consciente y el lenguaje.

Este número, dice Dunbar, no ha cambiado ostensiblemente a lo largo de la historia de la humanidad. Las poblaciones de la era neolítica estaban compuestas por 150 personas, lo mismo que la unidad militar básica en la antigua Roma.

Aunque el número no varía, sí lo hacen las personas que lo componen. Según el británico, esto sucede porque “dejamos de interactuar con algunos por largos períodos de tiempo, lo cual debilita las relaciones. Los lazos familiares, en cambio, suelen ser más fuertes sin importar que las personas no estén en constante contacto”.

Pero esta incapacidad de recordar quién es quién no ha impedido que los usuarios de Facebook sigan coleccionando contactos como si fueran estampillas. Y es así como una persona cualquiera llega a acumular un número de ‘amigos’ tan elevado que se acerca a los 5.000. Por supuesto, estas relaciones virtuales nada tienen que ver con las que se desarrollan gracias al contacto cara a cara. Para empezar, son nexos débiles que en la mayoría de los casos solo llegan a consolidarse si se concreta la interacción real, que es la que permite ver la sinceridad de los gestos y las reacciones del otro interlocutor.

Otra característica de las relaciones virtuales es que no tienen que ser recíprocas, se pueden aceptar nuevos contactos en el Facebook sin que esto signifique que hay una relación de amistad de por medio. Es así como funcionan los ‘amigos trofeo’, personajes famosos que la gente añade porque es seguidora de su carrera, y las celebridades aceptan estas solicitudes por motivos de exposición y publicidad.

Pero las redes sociales también tienen sus ventajas a la hora de socializar. Según el sicólogo Camilo Mendoza, “la pantalla cumple con la función de relajar la posible ansiedad de un primer encuentro cara a cara, algo que les ocurre a muchas personas, no solamente a los tímidos. Lo importante es que estos encuentros se lleven a la interacción real en algún momento”.

Porque de lo contrario, su nuevo amigo puede eliminarlo en cualquier momento, algo que no haría uno de sus 150 nexos reales. A propósito, ¿cómo saber quiénes son? Según Dunbar, son las 150 personas que con mayor facilidad aceptarían hacerle un favor.