MENSAJE POSTUMO

Documento desconocido escrito por Freud en 1915, expresa teorías aún más revolucionarias de las que se le conocían al padre del sicoanálisis.

16 de marzo de 1987


La época y el escenario, como en cualquier historia de aventuras, es la Edad de Hielo y los protagonistas forman parte de una horda de hombres primitivos, gobernados por un tirano contra quien se alzan sus hijos, son enviados al exilio y regresan para asesinarlo. La culpa por esa muerte ha pasado desde entonces de generación en generación y es la raíz de la neurosis y otros desórdenes mentales que afectan a la humandiad.

El reciente descubrimiento de un manuscrito de Sigmund Freud, A Phylogenetic Fantasy, redactado en 1915 y extraviado durante todos estos años, contiene su propuesta sobre el origen de la ansiedad, la paranoia y otras alteraciones síquicas que condicionan la conducta cotidiana de millones de personas. El manuscrito, publicado hace algunas semanas en Alemania, ha sido traducido por la Universidad de Harvard y, para los investigadores y amantes del sicoanálisis, es una pieza clave para comprender mejor las ideas y la obra de quien aunque descartó luego esta hipótesis, siguó usando algunas de estas propuestas en varios libros y conferencias.

El manuscrito revela la influencia que sobre el autor ejercieron las ideas biológicas de su época, especialmente las del desacreditado naturalista Jean-Baptiste de Lamarck, quien trabajó entre los siglos XVIII y XIX. Freud escribió estas notas durante un período muy tenso, cuando temía una muerte repentina y presenciaba cómo algunos de sus discípulos se apartaban de sus teorías y proponían nuevas tesis. Uno de ellos, Carl Jung, habría de exponer ideas evolucionistas que coinciden con algunos puntos contenidos en este manuscrito.

El texto, que ha sido analizado con pasión por varios expertos, está redactado con el estilo que Freud utiliza para explicar con más sencillez sus teorías, descripciones literarias que giran alrededor de una historia que pudo o no ocurrir en la ralidad, pero sirve para sostener un contenido mitológico acorde con los conflictos humanos analizados. El manuscrito está dividido en dos partes. En la primera, con un estilo directo, hace un rsumen de su teoría sobre los orígenes de la neurosis y otros desórdenes mentales. En la segunda parte explica cómo estos conflictos síquicos pueden ser remanentes de distintas evoluciones mentales de la humanidad. En una obra anterior a este manuscrito, "Tótem y tab", ya había analizado detenidamente uno de los clásicos conflictos freudianos, el del padre y los hijos, los cuales aquí emergen como personajes de esa Edad de Hielo, desde la cual provienen todas las ansiedades contemporáneas.

Aun los no adictos a las teorías sicoanalíticas se encantarán con esta obra, porque Freud cuenta una historia fantástica y entretenida sobre esos seres humanos que vivían en una especie de paraíso, con todas sus necesidades solucionadas. Pero, con la llegada de la Edad de Hielo, sus ansiedades comenzaron a aumentar. Esa ansiedad, explica Freud, es la misma que sufren los niños cuando temen a los extraños, cuando tienen que enfrentarse a algo nuevo y desconocido, es la misma alteración que los adultos ahora sufren con el nombre de ansiedad histérica. A medida que la Edad de Hielo proseguía, las hordas tenían que limitar la reproducción de la especie y se sometieron a una serie de perversiones sexuales para controlar la población. Todos esos cambios en su conducta sexual trajeron situaciones de histeria y ansiedad que pasarían de generación en generación.

El manuscrito forma parte de la época durante la cual ya Freud tenía concebida y materializada su teoría sobre la personaldiad y se puede mirar como un acercamiento a las ideas evolucionistas de la época, especialmente las de Darwin y Lamarck. Un experto de Harvard comentó que Freud se hubiera horrorizado ante la posible publicación de estos papeles, pero es un hallazgo significativo para comprender mejor el trabajo del científico. El manuscrito forma parte de un grupo de doce trabajos escritos entre 1914 y 1915, en los cuales condensó sus ideas sobre lo que más tarde sería su gran trabajo sobre la siquis. El mismo decidió publicar cinco de estos trabajos y supuestamente destruyó los otros. Se conservan numerosas cartas de la época, en las cuales contaba a otros colegas cómo trabajaba en lo que llamaba la "metasicología" y expresaba satisfacción porque finalmente tendría condensada en una misma obra todas sus investigaciones. Sin embargo, en una carta fechada en 1919 y enviada a su discípula y buena amiga, Lou Andreas-Salomé, negaba haber escrito otros trabajos, entre otros, el de la teoría sobre el remoto origen de la neurosis. Los papeles fueron encontrados entre las pertenencias de su hija Ana, quien murió cuatro años atrás, y el manuscrito fue publicado con éxito hace algunas semanas en Alemania.-