PARA LOS NIÑOS

EN MENOS DE TRES A;OS, LOS COLOMBIANOS FINANCIARAN LOS PROGRAMAS DE UNICEF EN EL PAIS.

13 de enero de 1997

Quienes han comprado alguna vez las tarjetas navideñas y los productos de Unicef piensan que esa contribución va directo a los niños de un lejano país africano. La mayoría ignora que todos los recursos aportados por los colombianos nunca traspasa las fronteras y hace parte del presupuesto que maneja este fondo para mejorar la calidad de vida de la niñez del país en frentes como la paz, la atención primaria en salud y la educación, entre otros. Aunque hoy todavía la cifra recaudada por la venta de estas tarjetas es inferior a los costos de los programas, que ascienden a los 3,5 millones de dólares, antes de que finalice el milenio serán los colombianos quienes aporten gran parte de ese presupuesto. Las tarjetas han sido por tradición la manera como los colombianos han contribuido con Unicef, pero desde hace un par de años el fondo ideó una serie de estrategias para aumentar las posibilidades de contribuir con esta causa. Así como cualquier persona interesada en esta labor puede hacer donaciones a través de correo directo o en forma personal y apoyar un programa en particular, existe una serie de alianzas corporativas, mediante las cuales las empresas pueden ayudar a encauzar los recursos para el fondo. Una de las alianzas que más éxito ha tenido es la de promoción, por medio de la cual una compañía advierte al público que con cada compra de su producto Unicef Colombia recibe un porcentaje. Las empresas también puede ayudar a la niñez en Colombia poniendo a disposición su infraestructura para recaudar fondos. Algunos centros comerciales y supermercados han ofrecido sus instalaciones para la venta de tarjetas. Con las compañías aéreas se logró otro apoyo ingenioso en sus vuelos internacionales. "Se recolecta el dinero o cambio que los pasajeros traen del exterior para financiar programas de nutrición y salud en las zonas más deprimidas del país", afirmó Gloria Barbier, directora de recaudación de fondos. Otra convenio exitoso se firmó con una cadena internacional de hoteles para lograr que los viajeros cancelen la cuenta del hotel con un número cerrado. Así, el excedente será destinado a los diferentes programas de Unicef en Colombia.