SALUD SE ESCRIBE CON LLANTO

Investigaciones realizadas por especialistas<BR>norteamericanos demostraron que el llanto es tan saludable para el organismo como la risa.

8 de junio de 1992

HACE MILES de años nadie sabe ni cómo ni cuándo, el mito del llanto como expresión de debilidad se montó en el bus de la cultura occidental y desde entonces ha sido difícil zafarse del prejuicio. La educación masculina, la asociación entre lágrimas y mujeres, y el hecho de que en occidente exista cierta reserva ante las manifestaciones de tristeza, han sido los principales factores que le han restado importancia a llanto.
Sin embargo la ciencia médica ha descubierto que llorar no es tan malo como se cree. Recientes investigaciones realizadas por especialistas norteamericanos concluyeron que las lágrimas, lejos de ser simples compuestos salinos, tienen una función más importante en la vida del ser humano.
Según los estudios, el llanto es tan saludable como la risa. Una de las razones por las cuales las personas se sienten bien después de llorar, es que las lágrimas remueven químicos que se han acumulado en el cuerpo por causa del estrés.
Los especialistas aseguraron que las lágrimas emocionales contienen aproximadamente un 24 por ciento más de proteínas que las lágrimas que salen cuando el ojo está simplemente irritado, y hacen que el llanto con sentimiento sea una terapia efectiva para combatir las preocupaciones. Con las lágrimas el organismo humano se libera de los problemas y entra en un estado de relajación similar al producido por la risa.
Pero el alcance del llanto no se detiene allí. Las investigaciones registraron que las lágrimas contienen dos hormonas rolactín y adrenocorticotropic (ACTH) producidas por la glándula pituitaria. Durante una situación estresante y de tensión, estos compuestos se desprenden en la corriente sanguínea y se concentran en el organismo. Por tanto, las lágrimas pueden ser una respuesta adecuada contra las presiones porque remueven estas hormonas acumuladas.
Según la publicación RedBook, los beneficios físicos de reírse y llorar son casi idénticos. Ambos incrementan la entrada de oxígeno al cerebro y a los músculos, y bajan temporalmente la presión arterial de la sangre. Además crean un sentido de bienestar y liberan sentimientos de tristeza, felicidad agresión y hostilidad. El especialista Crepeau aseguró que "existen varios metodos para descargar emociones intensas. Experimente hasta que encuentre que es mejor para usted, si reirse o llorar. Pero hay que empezar por reirse y llorar al mismo tiempo ".
No obstante, en materia de llanto no todo es color de rosa. Si bien el estudio determinó que llorar es saludable, también detectó que su ausencia o su exceso son perjudiciales. Análisis realizados por la sicóloga y trabajadora social de la universidad de Boston, Katherine Kohler, así lo demostraron: Kohler trabajó con hombres y mujeres separados y divorciados. En su investigación encontró que los hombres en vez de llorar o admitir su tristeza, reaccionan a un pánico emocional dejándolo todo. Esto significa que pueden tomar diferentes vías de escape como la bebida, la obsesión por el trabajo o la vida frívola. Así mismo pueden desarrollar males causados por el estres como úlceras, colitis y vómitos frecuentes.
Cuando una persona afronta una situación difícil está en capacidad de asumir mejor sus problemas, mientras que aquellos que tratan de evitarlo y hacer todo tipo de actividades nunca pueden dejar ni la presión ni el estrés, y mucho menos solucionar la preocupación con inteligencia.
Pero si la ausencia de llanto es negativa, el exceso no se queda atrás. Los estudios de Kohler registraron que para al unas mujeres llorar es catastrófico porque les permite reconocer que están en estado depresivo. Como cuando la persona está deprimida tiende a aislarse y a volverse introvertida, puede no afrontar los problemas con la mayor objetividad.
En todo caso parece ser que llorar es toda una ciencia. Hay que saber cuándo, cómo y en qué cantidad.