TODO ESTA CONSUMADO

La marcha fúnebre en el entierro del LP la tocó el disco compacto.

8 de octubre de 1990

Millones de compradores en Estados Unidos y Japón se han dado por vencidos tratando de encontrar los tradicionales discos de larga duración o LP en los almacenes de música. Una celada tendida por los fabricantes de equipos de sonido y los ejecutivos del negocio discográfico, acabó con la vida del long play. Los grandes discos de pasta ya no suenan ni truenan y en muy poco tiempo serán parte de la historia del sonido como lo son hoy los fonógrafos, la victrolas, las radiolas y los discos de 78 revoluciones.
La aparición del disco compacto tocó la retirada para el LP, pero la industria discográfica se lava las manos y dice que la sentencia de muerte del long play, la firmaron los mismos compradores. El gerente de Tower Records, la cadena de tiendas de discos más grande de los Estados Unidos, dice que mientras los clientes se peleaban por comprar los novedosos discos compactos, los LP permanecían en los estantes intocables. Así que, según él, esa fue la razón que los obligó a descontinuar los LP.
La industria de la música se ha reorganizado alrededor del disco compacto. Hechos como la aparición de los walkman también han contribuido a la mala fortuna del viejo disco de pasta negra. Las ventas de casetes se han cuadruplicado y aunque los consumidores se quejan de la regular calidad del sonido de las cintas, consideran que son pequeñas, livianas y que pueden llevarse a todas partes.
La primera reacción de los consumidores cuando no encuentran los tradicionales discos en los estantes de los almacenes es de malestar, pero después de un tiempo empiezan a considerar la idea de comprar un equipo de sonido adecuado para tocar los discos compactos. La progresiva popularización de estos electrodomésticos ha hecho que los precios hayan ido reduciéndose poco a poco. Sin embargo, lo que ha indignado a los consumidores es ver que todavía no ha pasado lo mismo con el disco compacto que hoy cuesta el doble de un LP.
Las casas discográficas empezaron hace unos años a hablar mal del LP. Lo acusaron de regular fidelidad, de que se rayaban fácilmente, de que perdían su forma cuando se exponían al sol y llegaron a decir que los discos de pasta ocupaban mucho espacio en las bodegas y almacenes.
Esgrimiendo esos argumentos presentaron el disco compacto como la estrella del más liviano y que el sonido era tan fiel que sería como tener la orquesta en la casa. Sin embargo, algunos críticos, como el escritor Barry Fox, quien escribió en la revista inglesa New Scientist, aseguran que la capa de aluminio que cubre la mayoría de los discos compactos y que contiene los códigos digitales que determinan el sonido, tiende a deteriorarse cuando los discos se almacenan en temperaturas cálidas. Según él, los discos compactos no van deteriorándose poco a poco, sino que depronto sencillamente dejan de sonar.
Fox basó su artículo en experiencias hechas en una prensadora de discos en Japón, en donde CD fabricados con materias primas de mala calidad, quedaron inservibles después de haber sido tocados un promedio de 30 veces, tras ser sometidos a temperaturas ligeramente más altas que la temperatura ambiente.
A pesar de que se está viviendo la revolución del disco compacto, la extinción de los larga duración se tomará algunos años para sentirse en Colombia. Como dijo el propietario de un almacén de discos en Bogotá: " para nosotros la desaparición del LP no será cosa de 33 revoluciones por minuto, pero va a llegar pronto".
Mientras tanto en Estados Unidos, aunque los LP aún se consiguen en algunos almacenes, generalmente están tan escondidos que ni los vendedores saben de su paradero, en medio de estantes repletos de compactos y casetes.
El futuro de la música grabada está reservado para el sonido láser y las cintas. Las compañías discográficas en una nueva estrategia de mercado están introduciendo discos compactos y casetes sencillos, con una sola canción. Según los ejecutivos de las disqueras, los nuevos productos han tenido una buena acogida entre el público y sus ventas están creciendo vertiginosamente.
Lo cierto es que el Lp está en vía de extincíón y en unos pocos años lo se cosiderará una nostálgica pieza de museos. El LP está siendo desalojado de los almacenes de discos y ahora se empezará a verlo en los mercados de las pulgas y los cuartos de San Alejo, a donde lo confinó la tecnología.