ALCOHOLISMO

Todo exceso es nocivo

Tres meses después de que la cantante británica Amy Winehouse fue hallada muerta en su apartamento en Londres, la autopsia reveló que falleció por exceso de alcohol.

30 de octubre de 2011

Tres meses después de que la cantante británica Amy Winehouse fue hallada muerta en su apartamento en Londres, la autopsia reveló que falleció por exceso de alcohol. Pero el problema no fue el consumo como tal, sino el largo periodo de abstinencia que había soportado. La artista llevaba varias semanas sin probar un solo trago, por lo que el pasado 23 de julio, cuando recayó, su sistema nervioso central colapsó. Durante el tiempo que se mantuvo sobria, su cuerpo perdió la costumbre de recibir grandes cantidades de alcohol y su tolerancia a la bebida se redujo drásticamente. Así, cuando la vocalista quiso volver a sus excesos, su organismo, en proceso de desintoxicación, no pudo con tanto alcohol. A esto se le llama envenenamiento por alcohol. El periodo de mayor riesgo para los adictos en recuperación son los días posteriores a una recaída. La lección es que no hay que caer en los excesos ni siquiera a la hora de dejar un vicio, pues al hacerlo se corre el riesgo de morir.