| Foto: 123RF

DIETA

Beber moderadamente no engorda

Un estudio reciente contradice la creencia establecida según la cual una persona que desee adelgazar debe suspender por completo la ingesta de bebidas alcohólicas.

21 de marzo de 2017

Para muchas personas que quieren adelgazar una de las premisas es eliminar el alcohol de su dieta diaria. De hecho, muchos culpan al trago de esos kilos de más, no solo por su contribución calórica sino porque también puede provocar la pérdida de autocontrol y estimular el apetito y deseo de consumir alimentos ricos en grasa.

Sin embargo, una investigación reciente del instituto de investigación del Hospital Infantil del oriente de Ontario, Canadá, reveló que beber con moderación no engorda. Jean-Philippe Chaput, coautor del estudio, señaló que si bien hay una fuerte influencia genética que hace a algunas personas más propensas a engordar por el licor, en general las bebidas alcohólicas están relacionadas con la obesidad y el sobrepeso solo cuando se toma en exceso.

Recomendamos: Cambiar la cultura del consumo de alcohol

Lo anterior significa que las personas que normalmente beben vino con la cena, o se toman un cóctel antes, no tendrían problemas de sobrepeso ni dañarían su dieta. Chaput y su grupo de investigadores examinaron varios estudios que han indagado sobre la relación entre la ingesta de alcohol y el índice de masa corporal (i.m.c.) luego de evaluar a varias personas. Según el trabajo, publicado en la revista Current Obesity Reports, un trago diario en mujeres y dos en hombres no aumentaría el riesgo de obesidad.

El problema ocurre cuando los hombres toman más de cuatro tragos diarios, o tres en el caso de las mujeres, pues hay evidencia del alto riesgo de padecer obesidad y aumentar el tamaño de la barriga y la medida de la cintura cuando se consume esa cantidad o más. Los hombres son más propensos a padecer problemas de peso cuando se exceden con el alcohol, según este trabajo.

Sugerimos: El secreto de Islandia para que sus jóvenes dejaran de beber alcohol y de fumar

Los genes también pueden ser un factor influyente, pues algunas personas son más propensas a la obesidad y esto los hace padecer más problemas al consumir alcohol. De todas formas, Chaput aclaró que varios de los estudios que analizaron fueron hechos en perspectiva y no revelaron un panorama claro sobre la relación que hay entre el alcohol y el peso. En muchos casos los síntomas varían según cada persona, pues así dos personas pesen lo mismo, tengan una dieta similar y hagan ejercicio, tendrán una reacción distinta al tomar alcohol.

En cualquier caso, la recomendación general es que las personas no se abstengan de tomar alcohol, pero que lo hagan de forma moderada. Además deben procurar comer menos y ejercitar más el cuerpo para mantener estable su peso.

Puede leer: ¿Cómo hacer para que en Colombia los jóvenes dejen de consumir drogas?