Viagra para mujeres: ¿satisfacción o peligro?

La droga flibanserin, conocida como el ‘viagra para mujeres’, está suscitando importantes debates entre la comunidad farmacéutica estadounidense. Los estudios han demostrado que aumentaría en un 2,5 % el número de “eventos sexuales satisfactorios” entre las consumidoras, contra un 1,5 % entre las mujeres a quienes fue administrado un placebo. Pero la pregunta es si este beneficio es suficiente para contrarrestar sus efectos colaterales. Los riesgos probados son una baja presión arterial, desmayos, náuseas, adormecimiento y heridas accidentales.

La compañía Sprout Pharmaceuticals le ha pedido una vez más a la Administración de Productos Alimentarios y Farmacéuticos de EE. UU. (FDA, por sus siglas en inglés) la autorización para prescribir una dosis diaria de flibanserin para tratar el “desorden de deseo sexual hipoactivo” entre la población femenina. La droga ya fue rechazada dos veces por el FDA en el 2010 y el 2013. Ahora se ha revelado nueva información.

Al parecer, el ‘viagra femenino’ no sería realmente un equivalente del viagra masculino, pues éste último trata la capacidad del hombre para tener relaciones sexuales mientras que el flibanserin trataría de aumentar el deseo femenino, lo cual es bastante diferente. Y pese a que la ausencia de libido de las pacientes es un asunto preocupante, aún no se ha probado que se trate de una condición médica real, como lo recuerda en su edición de este martes el diario estadounidense The Wall Street Journal.

Sin embargo, varios grupos de mujeres se han quejado de que diversas drogas existen para manejar las disfunciones sexuales de los hombres mientras que ellas gozan de muy poca ayuda. El debate gira en torno a la pregunta de si los beneficios observados por las pacientes superan las preocupaciones de seguridad. Y también, claro, sobre su derecho a desear, y a obtener ayuda médica al respecto.

La agencia FDA aseguró en su estudio sobre la seguridad del medicamento que los graves riesgos de baja presión arterial y desmayos son las preocupaciones fundamentales. Este riesgo aumenta considerablemente cuando se combina con la toma de bebidas alcohólicas.

Por su parte, el experto en seguridad de los medicamentos, Thomas J. Moore, aseguró que no es una cuestión de discriminación de género pues el problema con el flibanserin es precisamente la ineficiencia del tratamiento. El especialista añadió que la droga tiene una alta tasa de abandono por parte de las pacientes, muchas de las cuales discontinúan su uso debido a los efectos secundarios y a que los beneficios del tratamiento son muy relativos y difícilmente se pueden medir con criterios objetivos, lo que le resta credibilidad.

El jueves de esta semana, sin embargo, un grupo de consulta le dará recomendaciones a la agencia, pues esta ha encontrado un aumento considerable de deseo sexual entre las pacientes.

La autorización de la FDA queda en suspenso pero lo que sí está claro es que las mujeres que sufren de problemas de libido, especialmente en la época de la pre menopausia, piden soluciones. Queda por verse hasta qué punto es recomendable que sea a través del suministro de medicamentos, y la espinosa cuestión de saber si será de venta libre como el viagra, o a través de prescripción médica.