TERCERA EDAD

¿Viejo yo?

Las canas, las arrugas y los achaques siempre han sido las muestras más dicientes del paso de los años.

22 de junio de 2013

Las canas, las arrugas y los achaques siempre han sido las muestras más dicientes del paso de los años. La semana pasada un grupo de investigadores británicos hizo un listado de otras señales menos evidentes pero igual de importantes de que ya se camina cuesta abajo. Estas son algunas de ellas:
  • Sentirse tieso.
  • Quejarse al levantarse.
  • Decir: en mi época...
  • No conocer las canciones que suenan en la radio.
  • Olvidar los nombres de la gente.
  • Escoger la ropa por la comodidad y no por la moda.
  • Notar que los demás se ven jóvenes.
  • Necesitar siesta.
  • Tener problemas con la tecnología.
  • Perder el pelo corporal pero ganarlo en las orejas, las cejas, y la nariz.
  • No poder perder peso en dos días.
  • Vestirse según el clima.
  • Ver cómo se agrandan sus orejas.
  • Sentir que se tiene derecho a decirle a la gente lo que se piensa así no sea educado.
  • Volverse adicto a la jardinería y a alimentar pajaritos.
  • Manejar muy lento.
  • Quedarse dormido en frente de la pantalla de televisión.
  • Poner los objetos de uso diario en el lugar equivocado.
  • Evitar alzar objetos pesados por miedo a tener dolor de espalda.