dermatología

Ese lunar que tienes...

Las manchas oscuras pueden ser un indicio de cáncer de piel. ¿Qué hacer con ellas?

24 de septiembre de 2004

La mayoría de personas saben que una pequeña mancha en la piel puede ser un gran lunar en la salud y por eso se mandan quitar esas imperfecciones en cuanto pueden. Pero a veces olvidan un detalle importante: no mandan a hacer biopsia del lunar que se extirpan. Cuando no se envía a patología lo más probable es que ni el médico ni el paciente se enteren de si su lunar era benigno o, todo lo contrario, un melanoma, uno de los tumores más agresivos. "Si era canceroso pasará inadvertido y sin tratamiento", dice Ramiro Sánchez, cirujano oncólogo. Esta es una de las razones por las cuales es frecuente encontrar pacientes que llegan al médico con cáncer de piel avanzado, con metástasis en los ganglios o los pulmones y en otros órganos del cuerpo y cuando ya el pronóstico es muy poco alentador.

La importancia de la biopsia radica en que el cáncer de piel tiene dos caras: puede ser el más benigno o el más agresivo, todo depende del tipo de lesión. Si es un carcinoma basocelular las probabilidades de curación son altas porque avanza lentamente. Si es un melanoma, por el contrario, cada día que pasa es un riesgo mucho más alto. Además con una lesión muy pequeña ya puede haber otras partes del cuerpo comprometidas. Los médicos no miden el melanoma en centímetros, como sucede con los demás tumores, sino en milímetros. En esta escala, 0,7 milímetros es curable, pero uno de dos o tres milímetros de profundidad ya es una lesión avanzada.

El problema con el melanoma es que crece muy rápido. Una de estas células malignas puede desprenderse de la masa inicial, llegar a los ganglios linfáticos y a través de este sistema viajar a cualquier lugar del organismo donde coloniza otros órganos, es decir, hace metástasis.

Para prevenir este proceso el experto propone un ABC que permite reconocer las lesiones sospechosas (ver recuadro). Cuando se detectan el médico recomienda en lo posible acudir a un dermatólogo oncólogo, un cirujano de cáncer o cualquier otro especialista. "Lo importante es hacer una biopsia para determinar cuál debe ser el manejo del caso".

Otras maneras de prevenir el cáncer de piel es evitar el sol cuando sus rayos son más poderosos (de 11 de la mañana a 3 de la tarde) y utilizar gorros o sombreros para proteger la piel. Están, además, las cremas bloqueadoras y protectoras.

Hay cuatro tipos de melanoma. El lentigo maligno es una mancha café que evoluciona lentamente. El de diseminación superficial es un tumor que parece una mancha oscura similar a la del aceite. Es el más común y está asociado a la exposición al sol. El nodular se presenta como un pólipo y es uno de los más agresivos pues así como crece para arriba lo hace para abajo, implicando fácilmente al sistema linfático. El acral lentiginoso crece debajo de las uñas, en las palmas de las manos y en el dorso de los pies. Es muy común en Colombia pero si se trata a tiempo tiene buen pronóstico.

Todos los lunares aparecen en la pubertad, hasta a los 17 años. Por eso el médico afirma que cualquier mancha nueva después de los 20 debe generar sospecha. No se puede pasar por alto ningún lugar. La espalda y los pies también deben entrar en el escrutinio y hay que advertir cualquier cambio. Todo este esfuerzo mantendrá alejada la amenaza de cáncer.