Gripe porcina: Argentina segunda en muertos

Alianza BBC
Valeria Perasso. BBC Mundo, Buenos Aires
15 de julio de 2009

Son 137 muertos, según el último parte oficial. Con esta cifra, Argentina se ha convertido en el segundo país del mundo con mayor número de víctimas fatales de la gripe H1N1.

Luego de varios días sin actualizar datos, el Ministerio de Salud confirmó el martes otros 43 decesos, ocurridos en las últimas 72 horas, en uno de los aumentos proporcionales más notorios desde que comenzó la epidemia.

Así, a un mes de la primera muerte reportada oficialmente, Argentina se ubica detrás de Estados Unidos en la lista de países en los que la gripe porcina se ha cobrado más vidas.

Las autoridades en Washington reconocen 211 muertes por la enfermedad, mientras que los últimos datos del Ministerio de Salud de México, ahora en el tercer lugar por número de muertos, computan allí 124 casos fatales.
Números y entredichos

Sin embargo, las nuevas cifras oficiales no han despejado del todo las críticas, rumores y suspicacias que han generado las políticas de salud del gobierno argentino, y que circulan tanto en los medios de comunicación como entre muchos ciudadanos comunes.

Es que, por caso, las estadísticas del gobierno nacional muestran en ocasiones diferencias con las que brindan las autoridades provinciales.
En la población, los datos no hacen más que confirmar el desconcierto y el temor ante la pandemia

"Son 13 los fallecidos confirmados", precisó el ministro de Salud porteño, Jorge Lemus, en una conferencia de prensa, el lunes, mientras que el parte nacional hablaba de dos muertos menos en el distrito capital del país.

Particularmente crítica es la situación en la provincia de Santa Fe, en el centro-este del territorio, donde se registraron 42 muertes sobre un total de 156 pacientes. A nivel nacional, los contagios se elevan a 3.056, aunque desde hace días sólo se realizan diagnósticos para confirmar la presencia del virus en personas que pertenezcan a los llamados "grupos de riesgo", como embarazadas o pacientes con condiciones de salud preexistentes.

En la población, los datos no hacen más que confirmar el desconcierto y el temor ante la pandemia. Un estudio realizado en 19 países en las últimas dos semanas revela que Argentina, junto con Bolivia, son los más preocupados por la rápida dispersión del virus H1N1.

Según la encuesta, realizada por la consultora internacional Ibope Inteligência, el 40% de los argentinos manifestó "un nivel de alta preocupación por el tema", y sólo 14 de cada 100 ciudadanos creen que "la eficiencia de la estructura existente" permitirá controlar la enfermedad.
Vuelve la calma

Pese al incremento del 45% en las estadísticas de muertes de los últimos tres días, que muchos epidemiólogos consideraron "alarmante", las autoridades hospitalarias coinciden en señalar que ha disminuido el número de consultas por posibles casos de influenza porcina.
Gripe A en Argentina

Según el director de Epidemiología de la provincia de Buenos Aires, Mario Masana Wilson, el primer pico de esta gripe "ya pasó", aunque la información escasa que se tiene sobre este nuevo virus no permite anticipar cuál será su comportamiento.

Cifras del Ministerio de Salud bonaerense, a las que tuvo acceso BBC Mundo, parecen señalar que el incremento de actividad en el sistema hospitalario provincial estaría controlado: las guardias médicas registran, en promedio, una tercera parte de las visitas que tuvieron semanas atrás, y en muchos centros de salud vuelve a haber camas disponibles.

Y las calles capitalinas también parecen recuperar de a poco su ritmo habitual.
Las calles porteñas también parecen recuperar de a poco su ritmo habitual

Aunque los bares y restaurantes tienen más mesas vacías que de costumbre y en los centros comerciales y supermercados no se forman largas filas para pagar, la zona de oficinas del centro porteño y el sistema de transporte suburbano operan como en días normales.

Incluso en las farmacias se consigue nuevamente el preciado "alcohol en gel" desinfectante, agotado durante la ola de temor ciudadano de hace unas semanas, aunque en algunos locales sólo se vende una cantidad limitada de frascos por cliente.

El jueves culmina, además, la veda de 10 días que habían anunciado los empresarios teatrales privados de la capital. Las salas reabrirán sus puertas durante el fin de semana, ávidas de recuperar parte del dinero perdido por los cierres preventivos.