La negra noche

Consejos para ir en busca del sueño perdido.

4 de diciembre de 1989

La pérdida de un ser querido, los problemas en el trabajo, un persistente dolor, o sencillamente unas condiciones adversas, son causas suficientes para no poder conciliar el sueño. Se trata, en la mayoría de los casos, de situaciones transitorias que desaparecen con la causa que las origina.
El verdadero problema surge cuando esta situación se prolonga durante mucho tiempo. Y suele deberse, en la mayoría de los casos, a una causa psicopatológica que está detrás. Así, no se trata sólo de no poder dormir, sino que se padece insomnio por un problema de ansiedad o de depresión.
Existen distintas formas de caer en el insomnio: tardar en dormirse, un trastorno de la iniciación del sueño, trastorno de la continuidad del sueño, también denominado pertinaz o intermitente; estas personas se despiertan a lo largo de la noche en incontables ocasiones. Despertar matutino precoz, llamado asímismo insomnio terminal.
El insomnio es un hábito pernicioso que es preciso afrontar e intentar superar a fuerza de voluntad. Lo fundamental es persuadir a los sentidos para que dejen de reaccionar a los estímulos externos e internos.
Cada insomne debe imponerse como objetivo más inmediato relajarse y alejar de su mente toda preocupación. En los casos de insomnio leve se logran buenos resultados con psicoterapia, unida a una higiene general del sueño. Entre los consejos higiénicos se pueden enumerar los siguintes:
- Poseer un horario regular para acostarse; irse a la misma hora a la cama ayuda a conciliar el sueño.
- Contar con una habitación decorada en tonos suaves y con una atmósfera que invite al descanso.
- También se recomienda realizar ejercicios físicos de forma regular y progresiva durante la mañana o primeras horas de la tarde.
- Los baños calientes son recomendables para estimular el sistema vegetativo, que es el que funciona en el sueño. Igualmente los masajes, que eliminan las contracturas musculares.
- Tomar un vaso de leche antes de acostarse o una infusión sedante. Ingerir una cena ligera.
- Hay que sentirse cómodo en la cama y dormir con prendas amplias o desnudo. El somier debe adaptarse a la espalda.
- La posición para dormir es importante. Si se tienen problemas de cervicales, habrá que dormir sobre una superficie lisa, con una almohada especial para la nuca y boca arriba.
- Es conveniente dormir sobre el lado derecho si se padecen problemas cardíacos.
- A veces también ayuda a conciliar el sueño la lectura, siempre que se trate de un texto corto y sosegado.
El insomne no debe "rumiar" el problema del sueño, sino verbalizar las cuestiones que causan ese estado puesto que, desaparecida la causa, desaparecerá el síntoma.