MALA NOCHE, FELIZ DIA

Una noche de insomnio parece ser un efectivo remedio contra la depresión.

30 de julio de 1990


Mientras la mayoría de la gente necesita dormir bien para poder funcionar al día siguiente otros, paradójicamente, cuando duermen demasiado, amanecen deprimidos. Y a menudo, sólo una larga noche de insomnio logra hacerlos sentir maravillosamente.

Por años, los psiquiatras han reconocido que los pacientes deprimidos duermen más horas de lo normal, pero sólo hasta ahora se sabe que la deprivación del sueño produce una dramática mejoría en sus síntomas.

Una investigación sobre la relación exacta entre sueño y depresión, ha permitido a los científicos encontrar los beneficios del insomnio como tratamiento contra la depresión. Sin embargo, hasta el momento, está visto que el curioso remedio sólo funciona durante un día.

Lo cierto es que los efectos de alteraciones de humor por el sueño pueden ser tan poderosos como los de una droga. En varios estudios, los investigadores han encontrado evidencias consistentes en que cerca de dos tercios de los pacientes deprimidos mejoran considerablemente después de una noche sin dormir. El resultado de extensos exámenes sobre el estado de ánimo y el sueño, realizados en pacientes, muestra clara evidencia de sus beneficios. Sin embargo, éstos siempre han sido de corta duración porque la mayoría de los pacientes sufre recaída, una vez duermen un poco. La más breve siesta, en muchos casos, basta para regresarlos a su estado de desesperación.

Es claro que algo importante sucede en el cerebro mientras la gente duerme. Lo que los investigadores se preguntan es por qué en unas personas una noche sin dormir puede aliviar la depresión mientras una corta siesta, produce un cambio radical en el estado de ánimo. La respuesta podría estar en que durante el sueño el cerebro libera una hormona u otra sustancia química que intensifica los síntomas de la depresión. Si bien, cuando despiertan se sienten muy mal, su estado de ánimo mejora a medida que avanza el día. Esto sugiere que durante la vigilia, el químico asociado con la depresión es eliminado por el organismo.

Mientras los científicos intentan en contrar una vía efectiva para poder utilizar la deprivación del sueño como terapia a largo plazo contra la depresión, lo cierto es que está visto que existe una razón bioquímica para que muchas personas adictas a la siesta despierten luego con un "genio de perros,"-