Mejor, junto al café

Se descubren propiedades benéficas de la bebida para los asmáticos.

17 de octubre de 1988

El consumo de café en el mundo ha tenido que superar las más variadas amenazas. Desde las teorías de que produce cáncer, úlcera y presión alta --ninguna de las cuales se ha probado-- hasta la campaña de que es mejor tomar Coca-Cola al desayuno, los mercados tradicionales del producto bandera de Colombia se han mantenido a costa de no pocos esfuerzos publicitarios de la Federación Nacional de Cafeteros y gracias al hecho de que está definitivamente arraigado en las costumbres alimenticias de muchos países. Pero siempre es bueno que, además de su excelente calidad y aroma, le salgan al café propiedades que no solamente lo hagan placentero sino aconsejable.
Esas cualidades han aparecido por cuenta de un estudio llevado a cabo en Italia. Una investigación a gran escala demostró que el asma bronquial es menos común entre los tomadores de café que entre quienes no lo prueban. El estudio concluyó además que, al menos en términos moderados, esos efectos benéficos se incrementan con el aumento del consumo.
La prevalencia de asma fue más baja entre la gente que tomaba tres o más tazas al día que entre los consumidores de dos "tintos", y así mismo menor entre quienes tomaban dos tazas que entre los que solamente apuraban una al día. Sin embargo, no se encontró beneficio alguno en tomar más de tres tazas en cada jornada.
La investigación fue llevada a cabo por el Instituto Italiano de Salud Nacional, la Universidad de Milán y el Instituto Italiano Central de Estadísticas. Las conclusiones se basaron en una encuesta realizada sobre 72.284 personas mayores de 15 años, escogidas matemáticamente para abarcar un espectro amplio y representativo de la población italiana. Sin embargo, no sorprendieron a ninguno de los investigadores; lo que más bien se produjo fue la confirmación de observaciones previas que sugerían que la cafeína tiende a dilatar los bronquios de los asmáticos.

Las buenas noticias no paran allí.El doctor Romano Pagano, uno de los investigadores, declaró que los datos recogidos sugieren además que el consumo moderado de café durante largos periodos, no solamente reduce los síntomas del asma bronquial, sino que hasta podría ayudar a prevenir la presentación de cualquiera de las manifestaciones de la enfermedad.
El equipo de investigación aclaró a The New York Times que se requieren estudios adicionales para eliminar cualquier posibilidad de que los hábitos y el estilo de vida de los participantes en la encuesta puedan distorsionar las conclusiones.
Algunos años atrás The Lancer, una revista médica británica, publicó que el consumo de café se había asociado con el aumento de materias grasas en el torrente sanguíneo, con la diabetes, la gota, la úlcera péptica, la alta presión sanguínea, el infarto y varias formas de cáncer. Aunque ninguna de esas acusaciones fue probada, y la publicación aclaró que el consumo moderado era perfectamente seguro, el daño sobre las ventas de café no tardó en sentirse. Un efecto que con un poco de suerte podría verse contrarrestado por las buenas noticias sobre el grano, una de las bebidas más populares del planeta.--