DEL PLAYSTATION AL MAC

Un 'software' de 49 dólares permite utilizar los juegos del PlayStation de Sony en los <BR>computadores Macintosh. Ventajas y desventajas.

12 de abril de 1999

Durante años el trago amargo de los fieles del Macintosh ha sido la deprimente falta de juegos
para su computador. Sin embargo, en enero, la empresa Connectix anunció una sorprendente posibilidad:
un programa que les permite a los últimos modelos de Mac ejecutar los juegos de las unidades Sony
PlayStation. Todos los propietarios de computadores Mac que se encontraban desesperados por falta de
entretenimiento comenzaron a devanarse los sesos preguntándose si el dichoso programa funcionaría y si
Sony, que es famosa por la celosa custodia de sus derechos de autor, no recurriría a los tribunales para
detener la distribución de la Estación de Juego Virtual (Virtual Game Station). Sony sí objetó, pero mientras
que los tribunales dirimen el asunto un juez federal autorizó la venta a los consumidores del paquete de
software a un precio de 49 dólares. En relación con la pregunta de si el programa trabaja, la respuesta es
que sí, y lo hace sorprendentemente bien. Una prueba con la Estación de Juego Virtual en un flamante
computador Mac G3 de 400 Mhz mostró que, una vez instalado, el programa autoriza cargar los juegos
directamente desde el disco de PlayStation, tal como si el Mac fuera una unidad Sony. Hubo un problema
con los controles Gravis Game Pad Pro USB, pero no impide jugar porque el teclado permite controlar
adecuadamente los juegos. Connectix advierte muy escrupulosamente que no todos los juegos del
PlayStation funcionan en su sistema. Pero juegos como Future Cop, NCAA Final Four'99 y Street Sk8er
funcionan muy bien. Y eso, para los usuarios de Mac, es altamente satisfactorio. No deja de ser válida, sin
embargo, la pregunta de muchos usuarios: ¿para qué molestarse en convertir en estación de juego un elegante
Mac, que puede costar miles de dólares, si por tan solo 80 dólares adicionales al precio del software de
Connectix se puede adquirir una PlayStation original, con la garantía de poder desarrollar todos los juegos
que ofrece? Sobre todo si se sabe que en menos de un año saldrá al mercado una nueva generación de
PlayStation impulsada por un computador de 300 Mhz _bautizado Emotion Engine por la Sony_, que puede
calcular más rápido que un Pentium III, presentar gráficos con la calidad de una costosa unidad de mesa,
amplificar sonido con la calidad de un estéreo compacto e inclusive exhibir películas de DVD. De todas
maneras los jugadores aficionados al Mac pueden estar tranquilos: la popularidad y la capacidad del
iMac están atrayendo cada día más creadores de juegos al campo Macintosh. ¿Ya vio usted el Myth II?
¡Espectacular! n Infochips Cada vez más la red se ha convertido en un lugar para hacer negocios. Tanto es
así que una de las universidades más prestigiosas de Estados Unidos, la Massachusetts Institute of
Technology (MIT), abrirá en el próximo otoño una especialización en comercio electrónico y marketing. Las
investigaciones que hagan los estudiantes servirán para explorar los sistemas de precio, distribución y
posicionamiento de los productos que se venden en línea y las bases de una nueva economía digital. Según
la página web www.searchwords.com, las siguientes son las seis palabras más buscadas en los motores
de búsqueda por Internet: 1. Sexo 5,46 por ciento 2. MP3 (archivos de sonido comprimido) 3,98 por ciento 3.
Warez (software gratis o de prueba) 3,77 por ciento 4. Hotmail (un sistema de correo electrónico por la www)
3,01 por ciento 5. Yahoo (un motor de búsqueda) 2,46 por ciento 6. Chat (salones de conversación) 2,23 por
ciento A finales de 1998 la compañía BlueMountain Arts, que crea tarjetas animadas con música para
mandar por correo electrónico de manera gratuita, demandó a Microsoft cuando descubrió que esta
corporación estaba bloqueando el envío de sus tarjetas mediante filtros contra el 'correo-basura' aplicados en
los programas de correo Microsoft Outlook y WebTv. Este año el juez de la Corte Superior de Estados
Unidos, Robert A. Barnes, le ordenó a Microsoft la entrada libre de las tarjetas BlueMountain a través de
los filtros, argumentando que la medida le había causado grandes daños a BlueMountain y que las
evidencias mostraban que Microsoft había considerado la posibilidad de meterse al mercado de las tarjetas
por correo electrónico.