| Foto: Guillermo Torres

BANCA

Bienvenidos a la fiesta

Han llegado nuevos invitados al mercado bancario colombiano, un sector en el que hacía rato que no se veía tanto movimiento. Los inversionistas extranjeros exploran oportunidades.

11 de mayo de 2013

Mientras los grandes protagonistas de la banca en Colombia salen de compras por la región, en el terreno local se mueven otros jugadores. Hacía bastante tiempo que no llegaban nuevos actores al mercado, atraídos por una economía en crecimiento, cada vez más abierta al mundo y que ofrece grandes oportunidades en el negocio financiero.

El banco chileno CorpBanca es el nuevo invitado a la fiesta. Hace año y medio compró la operación del Banco Santander en Colombia y desde entonces tenía claro que buscaba una mayor participación en el mercado local. Para hacerlo rápidamente había que seguir comprando entidades, algo que no es fácil en Colombia, pues no hay muchas instituciones a la venta. Pero, como dice el refrán, el que busca encuentra y el grupo financiero chileno halló una oportunidad. Se quedó con Helm Bank, una entidad que participa con el 4 por ciento del mercado y ha sido muy apetecida en el sector. 

CorpBanca es el quinto banco más importante de Chile. Su llegada al país es una muestra más del interés austral en la economía colombiana. Hace dos años abrió sus puertas el banco Falabella, que se convirtió en la primera institución bancaria chilena en tener presencia en el país. Hace parte del Grupo Falabella de Chile que llegó a Colombia en 2005. Esta es una entidad especializada en la banca de personas que ha venido creciendo a través de la tarjeta CMR Falabella.

Otros  jugadores extranjeros consolidan su posición. Este año se dio vía libre a la fusión entre Colpatria y Scotiabank Colombia. En la actualidad The Bank of Nova Scotia es el mayor accionista controlante de las entidades que intervienen en la operación de fusión. Con su nuevo socio, Colpatria espera morder una mayor tajada de la banca empresarial. 

El mercado bancario colombiano también ha atraído a los jugadores brasileños. Desde hace poco más de dos años se rumoreaba sobre la llegada al país del gigante Itaú. Como ha venido sucediendo con otros inversionistas internacionales, buscó oportunidades para comprar algún banco o asociarse con alguien, pero no le fue tan fácil. Tuvo un pulso con Scotiabank para adquirir Colpatria, pero el canadiense se quedó con el 51 por ciento de la entidad colombiana, por la que pagó 1.000 millones de dólares.

Pero esto no desanimó a Itaú. Después de buscar otros negocios para entrar a Colombia, un mercado que considera clave en la región, decidió crear su propio negocio: Itaú BBA Colombia Corporación Financiera. Se trata de un banco corporativo especialista en banca de inversión y tesorería del Grupo Itaú Unibanco, el mayor conglomerado financiero de América Latina y uno de los mayores del mundo por capitalización bursátil.

La intención del poderoso banco brasileño es conquistar el mercado de las grandes empresas del país, interesadas en invertir y expandirse tanto a nivel local como regional.  Su cartera está compuesta por 3.100 de las más grandes empresas de América Latina y más de 700 inversionistas institucionales. 
Itaú ingresa a un sector en el que no hay muchos competidores, pero sí muy fuertes. La corporación Corficolombiana que pertenece al Grupo Aval, la más grande del país con activos cercanos a los nueve billones de pesos; Banca de Inversión Bancolombia del Grupo Bancolombia, el mayor del país; JP Morgan; y BNP Paribas.

Otro gigante que hizo su ingreso al mercado colombiano es el brasileño BTG Pactual, a través de la compra de Celfin Capital, una sociedad comisionista de bolsa con sede en Santiago de Chile y filiales en Perú y Colombia. En el pasado, Pactual intentó llegar al mercado colombiano a través de la firma Correval, pero no lo concretó. En el banco brasileño, el Grupo Santo Domingo tiene una pequeña participación accionaria, a través de un pool de inversionistas internacionales.

Pero el mercado bancario también les ha dado la bienvenida a otros nuevos actores que quieren incursionar en el microcrédito, un segmento que ha permitido que el país avance en bancarización. Es el caso del WWB, que se constituyó como banco en febrero de 2011 de Bancamía y de Procredit. Los más jóvenes, como Pichincha, Finandina y Bancoomeva están mostrando que en su nicho de mercado pueden ser eficientes y rentables y ofrecer nuevas opciones a un país que todavía tiene mucho por hacer en bancarización. Todo indica que el mercado colombiano seguirá despertando interés, y no es extrañar que a la fiesta lleguen más invitados.