MEDIOAMBIENTE

Con decisión de la ANI no termina incertidumbre frente a puerto en Tribugá

Comunidades, ambientalistas y otros sectores de la sociedad civil hacen un llamado al Gobierno Nacional y otras autoridades para que se le haga seguimiento al proceso, pues la Sociedad Promotora Proyecto Arquímedes ha anunciado que el proyecto continúa.

1 de octubre de 2020
La pesca es una de las principales actividades económicas de las comunidades en el Golfo de Tribugá. Foto: MarViva

Atentos. Así se mantendrán comunidades, ambientalistas y otros sectores de la sociedad civil frente a la posibilidad de que la Sociedad Promotora Proyecto Arquímedes siga adelante con los trámites para llevar a cabo la construcción de un puerto en el Golfo de Tribugá, luego de que la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), declarara el "desistimiento tácito" de la solicitud de concesión portuaria por no cumplir con los requisitos.

Si bien este desistimiento es un mecanismo para terminar el proceso de solicitud de la concesión porturia de esta megaobra en el Pacífico colombiano, la notificación de la ANI puede ser controvertida en los próximos días por la compañía, pues su gerente, William Naranjo, ha anunciado en las últimas horas que el proyecto sigue firme.

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Por esta razón, más de 20 organizaciones ambientalistas miembros de la Alianza Nuquí, entre ellas, WCS, MarViva, WWF Colombia, Clínica de Medio Ambiente y Salud Pública de la Universidad de Los Andes, Expedición Tribugá y Manglares Vivos, entre otras, continuarán haciendo seguimiento al proceso. "Hacemos un llamado a la ANI a permanecer firme en su decisión y a ceñirse a los conceptos emitidos por las entidades consultadas, esto de acuerdo a los lineamientos del Decreto 1079 de 2015", dijeron a través de una comunicación oficial.

Playa en el Golfo de Tribugá. Foto: Expedición Tribugá


Si bien celebran la decisión de la ANI, le piden al Gobierno Nacional, a las autoridades regionales y locales, a las organizaciones
de la sociedad civil y a los demás interesados a hacer seguimiento al proceso y a seguir impulsando el modelo de desarrollo propio e interétnico de la región, basado en la pesca artesanal responsable, el ecoturismo comunitario, la agricultura, la preservación de saberes culturales tradicionales, las áreas protegidas, entre otros.

Para estas organizaciones, la decisión de la autoridad estatal da cuenta de la falta de capacidad técnica y financiera de Sociedad Arquímedes para asumir una obra de esta envergadura, que traería importantes impactos negativos económicos, socioculturales y ambientales a las comunidades y al territorio. 


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De igual manera, instaron a la Gobernación del Chocó a retirar el Proyecto de Ordenanza que pretende declarar el Puerto de Tribugá como obra de utilidad pública e interés social y a las demás autoridades correspondientes a tener en cuenta esta decisión en el momento de evaluar la viabilidad de este proyecto.

Es necesario seguir impulsando espacios de participación y decisición colectiva, en los que las comunidades de Nuquí, de manera autónoma, den cuenta de sus propios modelos de desarrollo.

Habitantes del Golfo de Tribugá. Foto: Expedición Tribugá

Por su parte, Manuel Rodríguez, ex ministro de Ambiente, catalogó como una gran noticia que se haya anunciado que el Puerto de Tribugá no va más; sin embargo, llamó la atención sobre la necesidad de mantenerse "alerta frente a las nuevas embestidas de quienes pretenden convertir este lugar excepcional por su biodiversidad y paisaje en un simple negocio depredador".


La ex gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, por su parte, le propuso al Gobierno Nacional contemplar la posibilidad de destinar el presupuesto de Tribugá para potenciar el turismo de naturaleza en esta región con tanta riqueza natural, la protección de la flora y la fauna y las distintas especies que allí habitan.
Desde el momento en que se conoció la noticia de la ANI de declarar el desistimiento tácito de la solicitud de concesión portuaria por no cumplir con los requisitos, el tema se volvió viral en las redes de quienes recibieron con beneplácito esta información, por considerar que es una excelente determinación para las comunidades y para el medio ambiente.


Es de recordar que de acuerdo con los datos que manejan las asociaciones ambientalistas, la construcción del puerto afectaría directamente 114.438 hectáreas de áreas protegidas (que incluyen el DRMI Golfo de Tribugá-Cabo Corrientes y el Parque Nacional Natural Utría) y, por ende, la conectividad de una cadena de figuras de ordenamiento que busca garantizar la sostenibilidad, conservación y preservación de los recursos marinos y costeros del Pacífico chocoano.