Continental vuela con Biocombustibles

Continental Airlines anunció los resultados del vuelo de demostración de biocombustibles que se llevó a cabo el pasado 7 de enero de 2009 en colaboración con Boeing, GE Aviation/CFM International, y UOP, una empresa de Honeywell.

15 de julio de 2009, 12:00 a. m.

Bogotá.- La mezcla de biocombustible demostró un desempeño igual o superior al del combustible tradicional, logrando un incremento de aproximadamente 1.1% en la eficiencia de consumo en relación con la turbosina convencional en diferentes etapas del vuelo.

Se calcula que, considerando todo el ciclo de vida, las emisiones totales de gases de efecto invernadero asociadas al uso de biocombustible del tipo utilizado en el vuelo de demostración de Continental son entre 60% y 80% menores en comparación con el combustible tradicional.

“Estamos muy contentos por los resultados tan exitosos del vuelo de demostración de biocombustibles realizado por Continental”, dijo Leah Raney, Director Corporativo de Asuntos Ambientales Globales de Continental. “Estamos ansiosos por seguir colaborando con nuestros socios durante el proceso de certificación de los biocombustibles, y esperamos que comiencen a producirse en cantidades comerciales en un futuro próximo”.

El vuelo de Continental fue el primer vuelo de demostración de biocombustible sustentable por parte de una línea aérea comercial en Norteamérica utilizando un avión birreactor. Asimismo, es la primera ocasión en que una línea aérea comercial propulsa un vuelo utilizando combustible derivado parcialmente de algas.

Durante el vuelo, que tuvo una duración aproximada de 90 minutos, los pilotos de pruebas de Continental sometieron al avión, un Boeing 737-800 dotado de motores CFM International CFM56-7B, a una serie de maniobras de vuelo que incluyeron apagado y re-encendido de un motor en pleno vuelo y maniobras de aceleración / deceleración.

El motor No. 2 del avión funcionó con una mezcla de biocombustible consistente en 50% de combustible derivado biológicamente y 50% turbosina convencional. El motor No. 1, por su parte, se alimentó al 100 por ciento con combustible convencional, lo que permitió a Continental comparar el desempeño entre la mezcla de biocombustible y la turbosina convencional.

El vuelo tuvo lugar en enero de 2009 en Houston y la mezcla de biocombustibles incluyó componentes derivados de algas y jatrofa, ambas fuentes de combustible sustentable de segunda generación que no inciden de manera negativa en los cultivos de alimentos ni los recursos hídricos, y tampoco contribuyen a la deforestación. El aceite de algas fue suministrado por Sapphire Energy, mientras que el aceite de jatrofa fue aportado por Terasol Energy.

Este biocombustible simplemente se añade a los tanques del avión, por lo que no hay necesidad de hacer modificaciones a la aeronave ni a los motores. Luego de ser sometido a una inspección, el avión se reincorporó al servicio comercial de manera normal al día siguiente.

El vuelo de demostración de biocombustibles es una de las muchas iniciativas ambientales que Continental ha emprendido en los últimos años. También en fechas recientes, la compañía implantó diversas mejoras a su programa de reciclaje. Asimismo, ha emprendido proyectos enfocados en reducir el impacto ambiental de sus equipos de tierra probando fuentes alternas de energía, y ofrece a sus clientes un programa de compensación de emisiones de bióxido de carbono a través de Sustainable Travel International, una organización sin fines de lucro.

También este año, Continental colaboró con la Administración Federal de Aviación de los E.U.A. en Arrival Runway Program en el centro de operaciones que la aerolínea opera en el una iniciativa denominada Optimal Aeropuerto Intercontinental Bush de Houston. Mediante este programa se busca que las aeronaves realicen aproximaciones y aterrizajes más directos a fin de abatir las emisiones y el consumo de combustible en un vuelo promedio.