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Juan Manuel Echavarría nació en 1947 en Medellín. Crédito: León Darío Peláez

FOTOGRAFÍA

‘Ríos y silencios’ en el Museo de Arte Moderno de Bogotá

La más reciente muestra de Juan Manuel Echavarría: fotografías sobre el conflicto armado.

Daniela Vernaza Civetta
24 de octubre de 2017

Desde el 21 de octubre, el Museo de Arte Moderno de Bogotá (MAMBO) aloja Ríos y silencios de Juan Manuel Echavarría. La exposición está compuesta de fotografías de las ruinas y vestigios que, como monumentos abandonados o a manera de memorias y canciones, ha dejado la guerra. Desde una serie de fotos de tableros de las escuelas en donde las palabras, entre su presencia y ausencia, se disputan el dominio del espacio hasta las fotografías de Requiem NN, tumbas de desconocidos que un pueblo entero decidió adoptar y dar nueva vida al nombrarlos, la obra de Echavarría se mueve entre dos polos: la palabra y el silencio; la memoria y el olvido.

Fotos de Requiem NN de Juan Manuel Echavarría. Crédito: León Darío Peláez.

La fotografía, como medio artístico, es el que más fácilmente puede llegar a tener un propósito documental. En un principio, la fotografía muestra lo que se ve y suele ser interpretada como testigo de un momento. La obra de Echavarría es testigo de una guerra sufrida por varias generaciones en el país. Más que esto, la obra es un monumento a la memoria, una lucha contra el olvido y un deseo de no repetir.

Abrir el espacio del museo para exponer la obra del colombiano implica una dislocación de espacios y tiempos. El museo aloja tiempos pasados y vestigios de la guerra que sin embargo están siempre presentes y son todavía actuales. El interior del museo, transformado y vestido de gris para presentar las obras del artista, muchas de las cuales se hicieron en colaboración con actores directos de esta guerra, se convierte en otros lugares y en otros tiempos que de otra manera jamás podrían ser vistos desde la ciudad. La disposición del espacio, que sumerge al espectador en un transitar gris y reflexivo, lo invita a cambiar su mirada; a mirar hacia arriba o hacia abajo para apreciar las obras, a oír entre voces y ecos de “Guerra y Pa” los cantos de quienes más cercanos han estado a este conflicto, y a explorar en historias cotidianas lo que ha dejado la guerra.

La exposición estará en el museo desde el sábado 21 de octubre hasta el 7 de enero de 2018.