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Lorenzo Jaramillo nació en 1955.

Homenaje

La despedida íntima de Lorenzo Jaramillo

El documental 'Nuestra película’, de Luis Ospina, examina con calidez y cariño la vida y obra del pintor bogotano, quien falleció por culpa del sida cuando tenía apenas 36 años. Recordamos esta película -y a su protagonista- ahora que el Museo Nacional y el Museo de Artes Visuales preparan una exposición en su honor, a partir del 29 de junio.

Ana Gutiérrez
21 de junio de 2016

Las melancólicas palabras de la canción en francés Je suis seule (estoy sola) introducen Nuestra película (1992), el documental que realizó el director caleño Luis Ospina sobre la vida y obra del pintor Lorenzo Jaramillo (1955-1992).

La música acompaña las duras pero honestas imágenes del artista, postrado en la cama por la enfermedad que, a los 36 años, le quitó la vida. Es hasta más conmovedor ver el clip, grabado solo año antes, en la que aparece lleno de fuerza y vitalidad. Jaramillo falleció poco después de grabar su parte del largometraje, asolado por el SIDA, que lo había dejado ciego. Desde el primer momento es claro que no sobrevivirá para ver la obra terminada. Los amigos y colegas entrevistados, como  el pintor Luis Caballero, el director de teatro Ricardo Camacho, el fotógrafo Hernán Díaz, el pintor Antonio Roda y el crítico de arte Germán Rubiano, hablan de él en pasado.

En una de las primeras escenas, Ospina le pregunta qué es lo que no quiere que sea el documental. Jaramillo contesta que no quiere una cinta que lo reduzca a "un señor que pintaba cuadros bonitos". El director lo complace: la cinta retrata, con una intimidad increíble, las múltiples facetas de un hombre amante del arte en todas sus manifestaciones, y la desgarradora tragedia de la enfermedad que lo acabó.

Lorenzo era hijo del historiador Jaime Jaramillo Uribe y de Yolanda Mora, antropóloga y docente universitaria, nació en Alemania y desde pequeño mostró un gusto por la cultura. Viajó extensamente, como a la India, donde le diagnosticaron su enfermedad, tenía afecto por el cine japonés y hablaba varios idiomas. Jaramillo se destacó por sus bodegones y fue dibujante, ilustrador y grabador. En toda su obra, sobresale su uso del color. Como explica en la película, sentía que el color era lo más importante. A lo largo de su carrera hizo muchos retratos, entre ellos de Eduardo Ramírez Villamizar, María de la Paz Jaramillo y el de su propio padre. Su amor de la música influyó su trabajo, creó obras inspiradas por Piezas en forma de pera de Erik Satie y por la banda Talking Heads. 

Con un uso magistral del blanco y negro y del color, Ospina acompaña a Jaramillo mientras este habla de cine, música, teatro y hasta un poco de sus propios cuadros. La cámara se posa sobre el arte que decora su habitación, los libros en francés en su biblioteca y el jardín que se vislumbra por la ventana de Jaramillo, al tiempo que incluye fragmentos de sus películas favoritas. El documental está organizado en cinco secciones correspondientes a los sentidos: la vista, el oído, el olfato, el tacto y el gusto; pero el corazón de la obra es la celebración de una vida que llegó a su fin.

El director empieza oculto detrás de la cámara, pero lentamente va apareciendo al lado de su sujeto, con una empatía palpable. Jaramillo se refiere afectuosamente al proyecto como "nuestra película" y afirma que debe decirle así porque no sabe cómo la llamarán al terminarla. Esa frase acabó siendo el título final de la obra, que ahora se encuentra disponible en la página de vimeo del cineasta.

A pesar de su corta vida, Jaramillo dejó más de 1.000 piezas: dibujos, óleos, ilustraciones, grabados y la escenografía que diseñó para varias obras en el Teatro Libre. En estos días, el Museo Nacional y el Museo de Artes Visuales de la Jorge Tadeo Lozano preparan una exposición para homenajear al pintor, uno de los grandes de Colombia. Bajo el nombre ‘Lorenzo, no como los otros’ está dividida en dos muestras, que abren sus puertas a partir del 29 de junio. La primera, en el Museo Nacional, cuenta con más de 200 piezas. La muestra estará dividida en cinco secciones, entre ellas pinturas acerca del cuerpo humano, representaciones poco tradicionales de ángeles y los diseños que realizó para distintas obras de teatro. La segunda, en el Museo de Artes Visuales, tendrá una muestra más pequeña, e íntima, del artista. A esto se le suman conciertos, intervenciones de artistas contemporáneos y proyecciones de películas, incluida Nuestra película.