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27 de junio de 2010

Por senderos de esperanza
Excelente el reporte gráfico que SEMANA publicó sobre la vida del presidente Juan Manuel Santos (SEMANA # 1468). Por sobre su formación profesional están su familia y vocación de servicio. Con el apoyo espiritual de don Enrique, la solidaridad de doña María Clemencia y de sus hijos y la buena voluntad de los ciudadanos, Colombia será guiada por senderos de paz y de esperanza. Señor Presidente: que la Divina Providencia lo proteja.

Carlos Fradique-Méndez
Bogotá


El mayor desagravio
Recibo con indignación el artículo ‘Y cómo es él’ sobre Juan Manuel Santos (SEMANA # 1468), que además difiere mucho del perfil que habían publicado en la edición anterior ‘Por qué santos. Por qué Mockus’. Indudablemente él tiene muchas cualidades, pero la revista no debe mostrar esta parcialidad. Decir que los recursos no son menos sagrados para Santos que para Mockus es un despropósito, pues en el mismo artículo se nota que una de las cualidades del nuevo Presidente es la del “mal menor”, y con la aprobación de varias de sus propuestas no han sido sagrados los recursos. Finalmente, el mayor agravio de ese artículo es cuando dicen que la ola verde “fue simplemente eso, una ola que se estrelló contra una roca”. Me siento indignado, pues más de tres millones de personas votaron libremente, sin maquinaria y por la idea de un país legal y civilizado. No me parece una simple ola que se estrelló; creo que fue algo muy importante en la política nacional y que servirá como precedente de cosas muy importantes a futuro.

Julián Becerra Naranjo
Manizales



De Dalita Navarro
El ex presidente Betancur, según la columna de María Jimena Duzán en SEMANA #1462, es un atrevido y un farsante, porque después de cumplir con su partido, con un discurso florido, apoyando a uno de los candidatos del conservatismo, votó por Juan Manuel Santos sin consejos de mi parte, valga decirlo, pues no me abrogo autoridad moral ni ética, ni política para aconsejarle a nadie, como sí lo hace la periodista. Sabe bien que Betancur hace muchos años está alejado de la política, que es una persona de convicciones profundas y ha llevado su ex presidencia con altura. ¡Con mucha dignidad! No deja de ser por ello un personaje público al que le cabe el país en la cabeza.

Así como la señora Duzán tiene la osadía de criticar y de pronunciarse por el candidato de su preferencia, Betancur tiene también el derecho a opinar y a decir por quién votó. Estoy segura de que lo hizo con responsabilidad, fue valiente y su elección, la mejor. Una cosa es votar como conservador y otra votar a conciencia. Si bien Betancur se sirvió en su momento del Partido Conservador, ello no quiere decir que deba entregarse a él sin cuestionar y sin pensar. ¡Eso sería lamentable!
Permítanme, finalmente, adornar esa aclaración con un toque de humor, que tanta falta le hace a la columnista. Seré atrevida y le pediré que lea e interprete mejor mis respuestas en la entrevista que me hicieron en la revista SEMANA del 7 de junio: “Los santos siempre están en las alturas, no se preocupan por un pobre diablo”. ¡He puyado a muchos y todavía no he visto sangre azul!... mi inteligencia da para más.

Dalita Navarro
Bogotá



Anda de parranda
En la edición #1468, la revista publica una columna titulada ‘Voto finish’ refiriéndose a la conformación de las listas al Senado de la República. Al hacer referencia al Partido Conservador dice lo siguiente: “…al cafetero caldense Arturo Yepes, hermano del fallecido cacique caldense Omar Yepes…”. Al respecto, quiero decirles que aún no he muerto, por el contrario, parodiando la canción El muerto vivo que cantaba Peret en los 60, “no estoy muerto, ando de parranda”, y me retiro del Congreso después de 36 años de actividad legislativa sin sufrir derrota alguna y continúo ejerciendo mis funciones como miembro principal del Directorio Nacional Conservador.

Omar Yepes Alzate,
senador de la República
Bogotá



Aclaración
Por medio de la presente quiero hacer una aclaración y solicitarles la rectificación correspondiente en relación con un Confidencial de su edición #1468 titulado ‘Los impopulares’. Ustedes señalan que esta oficina hace una medición para determinar los personajes más impopulares para los colombianos. Lo que esta oficina hace es medir la aceptación y favorabilidad de distintos programas gubernamentales, instituciones del Estado, funcionarios y personajes que impactan la gestión del gobierno. Lo que hizo la revista fue publicar la lista de los personajes con el criterio de imagen desfavorable. Esa modalidad de presentación no es producto de esta oficina ni es el espíritu del ejercicio de sondeo de opinión que se utiliza para apoyar la gestión del gobierno.

Mauricio Carradini Restrepo, consejero presidencial
Bogotá

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