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De José Fernando Isaza para María Isabel Rueda

Agradezco su amable comentario en su columna de SEMANA del 9 de junio. Quiero aprovechar para hacer unas reflexiones al tema allí tratado.

José Fernando Isaza Delgado
23 de junio de 2003

Agradezco su amable comentario en su columna de SEMANA del 9 de junio. Quiero aprovechar para hacer unas reflexiones al tema allí tratado.

Es muy efectivo su ejemplo sobre la pena de muerte, tema que afortunadamente no trata el referendo y sobre este lo único que puede pedirse es que se suprima en Colombia. La pregunta (hipotética) es de aquellas fáciles de entender, pero como usted bien lo advierte, una apropiada respuesta involucra difíciles decisiones y un análisis que supere lo emocional. Por otra parte, la fórmula matemática para repartir las curules, tal como está planteado es un galimatías sin sentido (adjudicación de curules). Artículo 263. La adjudicación de curules entre los miembros de la respectiva corporación pública se hará por el sistema de cifra repartidora. Este sistema resulta de aplicar aquella cifra única que obtenida utilizando la sucesión de número naturales, permita repartirlas todas por el mismo número de votos en la correspondiente circunscripción. A menos que el elector reconozca que la propuesta de reforma electoral, por vía del constituyente, es una mala traducción del método de D'Hondt, no les es posible calcular la distribución de curules. ¿Podría preguntarse cuántos electores conocen el método de D'Hondt? Es bueno mencionar que este sistema es en general más equitativo que el de cociente y residuo. En países con 'operaciones avispa', como nuestro caso, el sistema actual es muy inequitativo. Por otra parte el anhelo expresado por el redactor de la propuesta, de repartir las curules por el mismo número de votos se enfrenta al teorema de imposibilidad de Balinsky y Young, verdadera ley de hierro "un método de distribución de curules no puede a la vez satisfacer la condición de ser cuota y consistente".

Si a lo anterior se agrega que las listas que tengan menos del 2 por ciento de los votos para el Senado no se tienen en cuenta para la asignación de curules, se rompe, en aras de la consolidación de los partidos tradicionales, el anhelo de dar igual valor a cada voto. Coincido con Gaviria que preguntas mal formuladas y con inconsistencias matemáticas pueden conducir a errores.

José Fernando Isaza Delgado

Bogotá

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