Del embajador del Perú

En ‘A las malas’, SEMANA#929 , se hizo un cuestionamiento de la legitimidad de las elecciones que tendrán lugar el 9 de abril en el Perú. Se toma como base, las conclusiones a que han llegado organizaciones internacionales como el Centro Carter y la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH), cuyos representantes se hicieron presentes recientemente en mi país.

Considero mi deber aclarar que existen errores generales de apreciación en el análisis de dichas organizaciones que, al ser recogidos por SEMANA, pueden llegar a afectar la percepción de la opinión colombiana sobre el proceso. Ante todo, el Tribunal Constitucional declaró la constitucionalidad de la Ley de Interpretación Auténtica, lo cual ha reconocido el Jurado Nacional de Elecciones al aceptar la postulación del presidente ingeniero Alberto Fujimori en las próximas elecciones presidenciales. Sin embargo, tres de los magistrados de ese tribunal emitieron una resolución por la cual resolvieron que dicha ley no era aplicable al Presidente, contraviniendo una disposición constitucional por la cual se debe legislar en razón de las cosas y no de las personas. De otro lado, el presidente Fujimori ha hecho saber que se encuentra llano a aceptar las recomendaciones de esas organizaciones en cuanto contribuyan a la buena marcha del proceso, en aras a que no queden dudas de su transparencia. Es en la persecución de este fin, que se ha invitado a la OEA, así como la Unión Europea y otras instituciones, para que cooperen como observadores. Es claro que el apego del proceso electoral a las normas de derecho, constituye garantía de la solidez de un sistema democrático capaz de sustentar el progreso y el desarrollo, a lo que el gobierno de mi país asigna la más alta prioridad.