Embriagada de fantasía

Excelente su artículo 'La ira de los condenados', del señor Héctor Abad (SEMANA #1.146). Si hay un sitio de observación bastante productivo para darse uno cuenta de la objetividad de su escrito es, aunque muchos pensarían, que este es un absurdo concepto, Estados Unidos; siempre y cuando uno no pierda la capacidad de ser observador permanente de la manera como los gringos se ven a sí mismos y cómo consideran su relación con el resto del planeta. Y quizás lo es no solo porque la sociedad norteamericana anda embriagada con la fantasía de sus excesos materiales, sino porque vive completamente desconectada e indiferente a todas las miserables circunstancias que agobian al resto del planeta.