Por la administración de justicia

En la columna de Lorenzo Madrigal publicada en la edición #968 de SEMANA, el reconocido periodista discurre en múltiples opiniones y referencias sobre el proceso adelantado contra Alvaro Leyva Durán. El columnista pone a salvo nuestra integridad moral y respetabilidad profesional y califica como equivocado el procedimiento al que acudió Leyva: la calumnia.

Empero, don Lorenzo persiste, bajo su particular óptica, en calificar al fiscal general, doctor Alfonso Gómez Méndez, como “el Fiscal del Presidente Samper” y a la Fiscalía “como comprometida con el régimen anterior”, circunstancias que indicarían —en su personalísima opinión— las “furias persecutorias” del Fiscal.

Sobre el particular queremos enfatizar:

Trabajamos con el doctor Gómez Méndez porque se trata de una persona y un funcionario cuya rectitud y probidad están más allá de duda alguna. Jamás hemos advertido en su caso al menos una sola actitud que no corresponda exclusivamente a los más elevados principios de la administración de justicia. Porque tenemos esa certeza lo hemos acompañado en su gestión.

El doctor Gómez Méndez fue elegido por la Corte Suprema de Justicia de una terna presentada por el presidente Samper. De los tres candidatos, con igual opción, la Corte —tras un examen riguroso— eligió por amplia mayoría al actual Fiscal General.

Será un juez de la República y únicamente él, ajeno a cualquier presión, quien luego de examinar las pruebas y las alegaciones de las partes en el juicio público, determinará si condena o absuelve al doctor Leyva Durán.