Home

Cartas

Artículo

PROBANDO, PROBANDO...

19 de agosto de 1996

Parece que el 'acervo probatorio' no fue suficiente para siquiera dudar de la culpabilidad del Presidente. Sin embargo fue suficiente para sindicar y condenar al doctor Fernando Botero, al doctor Santiago Medina, a la representante María Izquierdo, al doctor Francisco Becerra, al doctor Alberto Santofimio, a Orlando Vásquez, y a tantos otros. ¿Cómo se explica que las pruebas que son válidas para la Corte Suprema de Justicia no valen nada ante la Cámara? ¿Con qué razones válidas se puede argumentar ante el coro de las naciones, que nosotros no somos una narcodemocracia? ¿Para qué seguir sosteniendo un clamor por una soberanía que invocamos únicamente cuando una Nación hasta ahora amiga, hace un reclamo justificado o no, lo cual no nos merece ni una página de análisis? Pero cuando la soberanía no solo del país sino de los individuos particulares es atropellada por narcotraficantes y narcoguerrilleros, el gobierno apenas hace la consabida condena.
Carlos Luchau Cuervo
Bogotá

Noticias Destacadas