Un ‘Virus tropical’ llega a Colombia

En una habitación en Quito, a mitad de los años setenta, cae un aguacero mientras una pareja colombiana concibe, sin saberlo, a su tercera hija. Es el momento en que empieza a existir Paola Gaviria, mejor conocida como Powerpaola, la artista plástica, historietista e ilustradora que retrató su infancia y adolescencia en Virus tropical. La aclamada novela gráfica cuenta con el característico trazo sencillo de la dibujante para explorar su poco usual universo familiar y su propio desarrollo.

En 2018, luego de unos cinco años de trabajo, la novela se ha convertido en una película animada que llega a la Competencia Oficial de Cine Colombiano del Festival Internacional de Cine de Cartagena (FICCI) entre el 28 de febrero y el 5 de marzo. El largometraje llegará a las salas de cine del país en abril de este año.

“En un principio alguien me había propuesto hacer la película con personas pero yo siempre me imaginé que esa película tenía que ser dibujada. Y si iba a ser dibujada, pensaba que ese reto me encantaría enfrentarlo a mí” explica Gaviria sobre el largometraje, animado a partir de unos 5000 dibujos originales hechos por ella para la obra. Esto le supuso a la artista hacer dos investigaciones distintas: una técnica, para desarrollar dibujos que se pudieran animar pero que conservaran su estilo particular, y una en la memoria. "Tenía que hacer un inventario de mi vida en dibujo, los pisos que había pisado, las plantas que había en Cali y en Quito, cómo eran las montañas, cómo eran los cielos. Lo hice entre Bogotá, donde estaba el equipo de grabación, y Buenos Aires, donde vivo. Dibujaba todos los días y los mandaba e iba dos veces al año a encerrarme con ellos en el estudio dibujando. Pero si ves los dibujos de la película, no es lo mismo al principio que al final. Pasó lo mismo en el libro, uno va descubriendo cómo hacer las cosas mientras uno las va haciendo. Es algo que va con la historia que contamos, que es sobre ir conociéndote y creciendo a medida que vas haciéndolo" explica la artista.

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Fue un proceso intenso, con un equipo pequeño: contaban con Gaviria, el director Santiago Caicedo, un guion de Enrique Lozano, unos cinco animadores y algunos productores y un premio del Fondo de desarrollo cinematográfico (FDC). Luego, complementaron esos fondos con una campaña de crowdfunding. “La película se demoró porque era un equipo relativamente pequeño para una película de animación y además es una película que se dibujó toda a mano. La idea era que fuera muy artística, que se sintiera el trazo, que fuera muy artesanal” dice Caicedo. Para él uno de los grandes retos fue adaptar la novela de 16 capítulos a un solo largometraje. “Solo podíamos tener a Paola en cuatro momentos de su vida porque técnicamente se nos volvió un reto tenaz. No la podíamos tener en toda su infancia, así que la retratamos de bebé, de 10 años, de 12 y de 18. Fue necesario como una transformación de la novela, tiene cosas nuevas y diferentes” dice el director. Otro tema fue la música, en la novela se hacen referencias a canciones de Rubén Blades y Pink Floyd, entre otras, pero era imposible tenerlas en la película. “Nos tocó hacer la música de ceros, inventarnos nuestro propio sonido que, así no sea exactamente de la época, diera la sensación de ser del momento” dice Caicedo de la banda sonora liderada por Adriana García Galán.

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Fue Caicedo el que le propuso postularse a la convocatoria del FDC a Gaviria. Los dos son amigos hace años pero en 2013, Caicedo hizo un cortometraje con ella y muchos de los que serían el equipo de Virus tropical. “Hacer Virus tropical era una tentación increíble, teníamos que hacerlo como fuera. Estaba listo, no hacerlo hubiera sido un error” explica Caicedo. Gaviria también recalca lo importante que fue el hecho de que el equipo estaba unido por lazos emocionales y lazos creativos. “Empezó como una idea de familia, entonces me gustó la idea de que la gente que lo hiciera también fuera como de mi familia” dice la artista.

Esa historia familiar, en todos los sentidos, se proyectó por primera vez en Animation is Film 2017, en Los Ángeles. Fue la primera vez que la vio Gaviria. Este domingo, 18 de febrero, estará en el Festival Internacional de Cine de Berlín antes de viajar a Cartagena y luego a Texas para el festival de cine South By Southwest. También, anota la productora Carolina Barrera, va a viajar a, por lo menos, dos festivales más que todavía no puede anunciar. Barrera también explica que en el FICCI tendrá una proyección en los barrios de la ciudad, no solo para el público del festival. Para ella no solo representa un logro para el equipo de la película sino un incentivo para seguir desarrollando la animación colombiana.

Para Gaviria es la posibilidad de que los espectadores puedan ver cosas con otras sensibilidades, en vez de ceñirse a la típica narración de Hollywood. La artista considera que el poder de Virus tropical radica en la universalidad de su historia. “Todos pasamos por situaciones parecidas. Es imposible no conectarse con un personaje que está creciendo, que es adolescente, y que vive cosas que de alguna manera uno también vivió. Cuando lo estaba haciendo pensaba ¿esto a quién le va a interesar? Es hecho por una chica y los cómics son de hombres, el dibujo es de cierta manera y depronto no gusta. Pero, bueno, yo tenía la necesidad de hacerlo y lo hice. Y la gente, hombres y mujeres, me han dicho que se sienten reflejados de alguna manera en Virus tropical” concluye.

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