La renuncia del abogado Abelardo de la Espriella a la causa de María Paulina Ceballos, la hijastra de Silvia Gette, tiene una historia mucho menos diplomática que la que se dio a conocer en los medios. De la Espriella y Paulina literalmente no se podían ver. Desde hace meses no se hablaban porque ella se oponía a todas las ideas que condujeran a una buena estrategia de defensa y el abogado sólo se entendía con los hijos de esta. De la Espriella y su cliente se reconciliaron temporalmente hace varias semanas, cuando Paulina fue detenida señalada de haber orquestado el asesinato de su esposo, el empresario barranquillero Fernando Cepeda. Pero ella salió de la cárcel, y las diferencias entre ambos continuaron. El viernes pasado tuvieron una fuerte discusión telefónica y allí terminó este ‘matrimonio’ laboral. De la Espriella renunció y dijo públicamente que sigue pensando que ella es inocente.