Confesiones aterradoras

Dentro de las confesiones que han hecho miembros del cartel de Medellín a las autoridades para obtener rebajas de penas, han aparecido revelaciones verdaderamente aterradoras sobre el mundo del narcotráfico. A los despachos oficiales han llegado testimonios en el sentido de que la forma de obtener información de alguien que parece haberle jugado sucio al cartel, era perforarle cada una de las rodillas con una broca eléctrica o sacarle los ojos con una cuchara ardiente.
Los funcionarios que han tenido acceso a estas confesiones no salen de su asombro.