Confidenciales

Conflicto de interés

26 de febrero de 2006

Un vivo acaba de formar un miniescándalo en el proceso de liquidación de la Caja Agraria. Diego Castaño Villamizar, quien fue contratado como asesor de la liquidadora para armar los pliegos y definir los términos de la licitación para la venta de una cartera de 150.000 millones de pesos, decidió él mismo participar en ese proceso. Ofreció 30.000 millones de pesos por esa cartera y ganó. Tan pronto se supo esto, el comité liquidador de la Caja declaró desierta la licitación, abrió una investigación y le aceptó la renuncia a Castaño.