El colmo del absurdo

El rifirrafe sobre las actas de la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores relacionadas con el pleito con Nicaragua ha sido bastante confuso.

16 de marzo de 2013

El rifirrafe sobre las actas de la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores relacionadas con el pleito con Nicaragua ha sido bastante confuso. El gobierno quería hacerlas públicas para que quedara claro que no tenía mayor responsabilidad sobre el fallo de la Corte de la Haya. El expresidente Pastrana, pensando que le querían echar la culpa, se indignó y se retiró de la comisión. Como las actas eran confidenciales, el gobierno tuvo que recoger velas y se inventó la fórmula de que solo se las enviarían a la Procuraduría. Esto es totalmente absurdo, pues deja la impresión de que expresar una opinión en un comité asesor puede ser objeto de investigación disciplinaria.