El motivo

21 de abril de 2007

En Washington se afirma que hay una razón desconocida para que Al Gore se haya negado a compartir escenario con el presidente Uribe en Miami: considera que con Colombia hizo el mayor ‘oso’ de su carrera. El 26 de julio de 1995, siendo Gore vicepresidente de Estados Unidos, le rindió homenaje en su país al entonces ministro de Defensa, Fernando Botero, reconociéndolo como el héroe colombiano de la guerra contra el narcotráfico. Al día siguiente, el 27, Santiago Medina le reveló al país que había ido a Cali por instrucciones de Botero para negociar los seis millones de dólares de los Rodríguez Orejuela. Cuando Gore se enteró de esta noticia bomba, sintió que había hecho el ridículo. Desde ese momento, el líder demócrata está prevenido frente a las ‘vacas sagradas’ de la política colombiana.