EL SALVADOR

16 de enero de 1995

Dentro de las historias que siguen aflorando en torno del Pacto Social, se ha sabido de una fuerte discusión que tuvo lugar entre el ministro de Desarrollo, Rodrigo Marín, y el alcalde de Bogotá, Jaime Castro. La polémica, que tuvo como origen los sacrificios que debían hacer las entidades territoriales, casi da al traste con la unidad del gobierno en un momento crítico de la negociación. Todo se arregló gracias a la intervención del ministro de Hacienda, Guillermo Perry, quien supo calmar los ánimos y volver a enrutar la discusión. Tanto en esa ocasión, como en la negociación del salario mínimo, el titular de las finanzas demostró que no ha perdido su tacto político.