CONFIDENCIALES

Por fin se entiende

23 de julio de 2016

Ahora que cada fin de semana 100.000 venezolanos cruzan la frontera con Colombia para comprar medicinas, alimentos básicos o papel higiénico, aumenta el misterio de por qué Nicolás Maduro no suspende los pagos de la deuda externa de su país para liberar divisas que le permitan sobrevivir a su pueblo. La comunidad internacional entendería que ante una emergencia nacional de esa magnitud se llegue a algún tipo de moratoria. La oposición y algunos banqueros serios tienen una explicación para entender la decisión del gobierno. Al parecer muchos de los bolichicos, que son la rosca de Maduro, y de pronto el propio presidente, tienen invertida buena parte de su patrimonio en los bonos de deuda venezolana. La rentabilidad de estos es alta, mientras se siga pagando. El día que se suspenda pierden prácticamente todo.