Congresistas a lomo de mula

La posesión de Santrich en la Cámara de Representantes puso sobre el tapete el tema del fuero. El debate giraba alrededor de si el exguerrillero estaba cobijado por este, aunque no se hubiera posesionado. La Corte Suprema de Justicia conceptuó que sí y verlo entrar al Capitolio indignó al país. Respecto de ese tema, Óscar Alarcón aportó un dato histórico divertido. En la Constitución de 1886 se determinó que los congresistas tenían fuero 40 días antes de su posesión y 20 días después de terminar su periodo. Esos plazos tan exóticos tenían una explicación. Como en esa época no existía el avión y prácticamente no había carreteras, a un congresista elegido en la provincia le podía tomar semanas llegar en mula a la capital.