Habrá subasta

16 de agosto de 1993

El gobierno nacional acaba de tomar la decisión de adjudicar la telefonía celular por un proceso de subasta pública. Tanto la Presidencia de la República como el Ministerio de Comunicaciones y otras agencias estatales involucradas en el proceso, consideran conveniente este mecanismo, pues elimina cualquier sospecha en el sentido de que la adjudicación sea hecha en realidad a dedo. Ante la cantidad de intereses que se encuentran asociados con las distintas empresas aspirantes a operar el celular, el Gobierno se decidió por el camino de la subasta, cuya definición y características jurídicas estudian actualmente los abogados de la administración.