Jet-Set

En la Cumbre del Pacífico se pudo medir las diferencias de poder económico  entre los países que asistieron. Por ejemplo, la presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, voló a Colombia en avión comercial. Todos los otros jefes de Estado llegaron en la nave presidencial y en cuanto a las delegaciones, la de México estaba integrada por los 15 empresarios más importantes de ese país y cada uno llegó en su propio jet. En el aeropuerto de Palma Seca no sabían cómo acomodar ese número de naves provenientes de un solo país y se referían a ellas como los aviones de José Gabriel, el embajador de Colombia que los había invitado.