El gobierno colombiano habría expresado al norteamericano su contrariedad, debido a los anuncios hechos por el Departamento de Estado en el sentido de que la visita del Presidente Reagan a Colombia se limitaría a pasar una noche en Cartagena. La Cancillería colombiana le recordó a la Embajada norteamericana que la sede del gobierno está en Bogotá y no en la Ciudad Heróica. Se argumentó que sería como si el Presidente de Colombia quisiera ser recibido en Miami por el Presidente de los Estados Unidos. Resultado: Reagan canceló su visita a Cartagena y dispuso solamente una escala de algunas horas en Eldorado, calificada por algunos como escala técnica .