Mal precedente

26 de enero de 2013

Hay rumores de que el procurador general, Alejandro Ordóñez, está estudiando si los escándalos de Bogotá dan pie para justificar la destitución de Gustavo Petro. A pesar de la popularidad de ese chisme, este tiene tantas desventajas como la revocatoria del mandato del alcalde que está proponiendo el representante Miguel Gómez y que aparentemente no va a prosperar. Petro ha cometido errores administrativos de una gravedad monumental, pero no es corrupto y no se puede abrir paso al precedente de que las personas elegidas por voto popular pueden ser destituidas por ineptas. De ser así, buena parte de los actuales alcaldes y gobernadores tendrían que irse.