Se robó el show

El acto mediante el cual se selló la paz con la guerrilla en El Salvador tuvo un momento crítico, cuando el delegado de la guerrilla hizo un discurso en tono dolido y vengativo hacia el gobierno del presidente Alfredo Cristiani. Cuando a éste le tocó el turno de hablar, la gente esperó una respuesta en ese tono y la situación se puso muy tensa. Pero Cristiani no hizo una sola referencia al pasado. Se centró en el análisis del futuro de su país, y tras terminar el discurso se bajó de la tarima y saludó de mano a cada uno de los excombatientes del Frente Farabundo Martí. La concurrencia, emocionada, lo ovacionó de pie durante 10 minutos.