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22 de agosto de 1988

Como se sabe, una de las cuestiones que buscaba ventilar el M-19 con el secuestro de Alvaro Gómez, era la de los desaparecidos. En particular, por el caso de la desaparición de Jaime Bermeo Cruz, jefe de finanzas del movimiento en la capital del país. Según un comunicado del M-19 de hace algunos meses, Bermeo habría sido capturado por el DAS, entregado por éste al Ejército y luego desaparecido. Hace pocos días, el cadáver de Bermeo apareció en un municipio de Cundinamarca. Pero existe otra versión sobre su desaparición y posterior muerte. Se cree que un comando dirigido por Bermeo habría colocado la bomba que estalló hace algunas semanas frente a la residencia del narcoesmeraldero Gilberto Molina, y que éste habría decidido vengarse, capturándolo, desapareciéndolo y luego asesinándolo.