El fútbol produce alegrías y también alteraciones del orden público. | Foto: Getty Images / Alfonso Cervantes

OPINIÓN

Cómo educar buenos hinchas

El viceministro del Interior, Luis Ernesto Gómez, cuenta cómo desde el gobierno nacional se trabaja para que los únicos bienvenidos a los estadios sean aquellos que van a alentar a su equipo.

Luis Ernesto Gómez*
1 de enero de 2018

El fútbol ha logrado unirnos. Pero para abordar su complejidad debemos analizarlo desde las realidades sociales y culturales de nuestra Nación. Cómo olvidar los momentos vividos en el Mundial de Brasil 2014, el 0–5 frente a Argentina o el empate contra Alemania en Italia 90. Allí, los colombianos fuimos uno solo, esos momentos debemos proyectarlos porque demuestran que, como a veces se grita desde la tribuna: “Sí se puede”.

Tampoco podemos desconocer que este deporte genera todo tipo de opiniones, principalmente por las alteraciones del orden público en los partidos, que conducen a las mismas reflexiones: cámaras, carnetización y más normas. Ninguna medida de control y seguridad es suficiente sin la participación de los hinchas, con quienes venimos trabajando en compromisos de convivencia, fortalecimiento del barrismo social y el diálogo entre los clubes y las barras.

Como gobierno hemos sido responsables en el análisis integral y en la forma como debemos abordar las situaciones generadas por nuestro balompié. De ahí la apuesta con el Plan Decenal para la Seguridad, Comodidad y Convivencia en el Fútbol 2014-2024, una política pública construida con la ayuda de todos sus protagonistas. La idea surgió de un hincha en la ciudad de Pasto cuando se construía el Estatuto del Aficionado. En Colombia los seguidores de este deporte han sido fundamentales en todos los avances normativos y de política.

Con el Plan Decenal le apuntamos al fútbol profesional y recreativo, que integre, cohesione y transforme la sociedad. Que se desarrolle de manera pacífica, segura y fomente el desarrollo social y comunitario, como herramienta de construcción de ciudadanía para la paz y la convivencia.

Desde la Comisión Nacional de Seguridad, Comodidad y Convivencia en el Fútbol, presidida por el Ministerio del Interior, se ha avanzado en la implementación tecnológica para la seguridad de los estadios. Junto a las Alcaldías de Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla y Manizales se adelantó la primera fase de un plan piloto para que cada uno de estos escenarios cuente con lo establecido en los protocolos de seguridad: un puesto de mando unificado, sistema de ingreso, sistema de perifoneo, tribunas, cámaras de circuito privado, entre otros puntos de infraestructura. Tarea que requiere de la voluntad de los dueños de los escenarios, los clubes organizadores y el gobierno nacional.

El seguimiento realizado dentro y fuera de los estadios da cuenta de una reducción significativa de los casos de violencia, que no superan el 7 por ciento. De hecho, 2017 es el año con menor nivel de hechos violentos, desde el comienzo de la implementación del Plan Decenal, de acuerdo con el informe de la Policía Nacional.

Ahora, de ninguna manera hay que estigmatizar a los barristas. Se debe diferenciar claramente entre un delincuente que comete actos criminales con la camiseta de algún equipo, y los hinchas que van al estadio a apoyar a su equipo. Las experiencias internacionales han demostrado que un trabajo serio y estructurado con las barras, en materia de autocontrol y convivencia, es parte fundamental de la solución.

Por ello, estamos trabajando en la consolidación del barrismo social. Las mesas regionales complementan esta estrategia que incluye la formación de los miembros de las barras en sus derechos y deberes como jóvenes e hinchas, así como la normatividad vigente respecto a las sanciones correspondientes a las diferentes conductas que se puedan presentar.

Este es uno de los mayores objetivos del Plan Decenal, y esta es una iniciativa de trascendencia nacional que involucra la voluntad de las diferentes instancias públicas y privadas para su debida ejecución. Se debe trabajar en equipo y jugar del mismo lado para sacar este plan adelante en el periodo convenido.

Esta política pública ha sido articulada con los Planes de Desarrollo locales de Medellín, Bogotá, Cartagena, Pasto, Tunja, Bucaramanga y Barrancabermeja. Trabajo en el que quiero destacar el liderazgo del alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, un proceso que es modelo para Colombia y el mundo.

No existen antecedentes de algo similar en otro país del planeta. Así nos lo ha hecho saber la academia latinoamericana especialista en los Estudios Sociales del Deporte. No es tiempo de improvisar, hay que cumplir la política de fútbol construida.

*Viceministro del Interior.