El centro es la memoria

La memoria se cultiva, se construye y se fortalece. Y ese ejercicio no es solo individual, también es social; por eso el Estado, desde sus instituciones, cumple un papel fundamental. Eso lo sabe Bogotá.

“Es muy importante ‘desespecializar’ la memoria, dejar claro que nos pertenece a todos”, afirma Mauricio Uribe, director del Instituto de Patrimonio Cultural (IDPC). Y concluye: “esta administración puso sobre la agenda este asunto”.

500 años

El 6 de agosto de 2038 Bogotá cumplirá 500 años de fundada. Y aunque faltan casi 20 años, el IDPC ya desarrolla proyectos ambiciosos para celebrar y ‘restaurar’ la memoria de la ciudad.

Al día de hoy se han intervenido 184 de los cerca de 350 monumentos de la capital, más de la mitad. Muchos de estos tenían todo tipo de marcas, estaban sucios, con grafitis, deteriorados por el paso del tiempo. Tampoco el más emblemático, el Bolívar de la Plaza de Bolívar, escapó a esa suerte: “Lo hemos tenido que recuperar varias veces”, agrega Uribe. Próximamente, el IDPC instalará una iluminación permanente en la estatua; a esa intervención se le sumarán cerca de 100 monumentos más para finales de 2019.

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Bogotá en el centro

Otro de los proyectos de restauración que ha adelantado el IDPC es el del centro histórico. El instituto ha intervenido 1.400 fachadas patrimoniales y brindado asesoría técnica para la peatonalización de la calle Décima y la carrera Séptima. El objetivo es que la gente construya una ‘nueva narrativa’ de ese lugar de la ciudad, su parte colonial: “Que la gente entienda que no son solo casas viejas, son casas de todos y hay que generar una apropiación social de ellas”, explica Mauricio Uribe.

Y para lograr lo anterior, además de las acciones que se vienen adelantando, la actual administración creó la hoja de ruta del Plan Especial de Manejo y Protección (PEMP) del Centro Histórico, que este año fue aprobado por el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, máxima instancia encargada de darle vía libre a la implementación de estos planes. Este permitirá repensar parte del desarrollo de Bogotá en general y del centro en particular. La idea es que todos los tipos de patrimonio (material, natural e inmaterial) apalanquen de forma integral el futuro y potencien la calidad de vida de sus habitantes. No es un dato menor que hasta 2 millones de personas recorren la zona a diario y que en ella viven 233.000 bogotanos.

“Queremos un centro más habitable, que acoja a sus residentes y que invite a vivir a 500.000 personas más. El plan de trabajo trazado es un instrumento con visión a 20 años para tener, con base en la memoria, un centro más caminable, con mejor aire y más seguro”, señala Uribe.

La visión de patrimonio del IDPC es integral: un centro conservado y seguro potencia la economía de la ciudad y mejora la movilidad. En un edificio emblemático como la Basílica del Voto Nacional, por ejemplo, se invirtieron 17.000 millones de pesos, pues se encontraba totalmente abandonado. La fachada se recuperó íntegramente y la fase más ambiciosa comprende la reconstrucción de su cúpula de vidrio, en la cual se reflejará la bandera de Colombia.

La restaurada Basílica será un símbolo histórico en un sector que se volverá foco de innovación, emprendimiento y cultura; a partir del Bronx Distrito Creativo de todos.