Con el acompañamiento de la fuerza pública, el país se prepara para diseñar rutas de avistamiento de aves y biciturismo, entre otras. | Foto: Cortesía Semana Rural

ANTETITULO

El rol de la fuerza pública en el turismo del posconflicto

Los ministerios de Defensa y de Comercio, Industria y Turismo impulsan estos 12 corredores que están transformando regiones aisladas por el conflicto en destinos turísticos emergentes.

31 de julio de 2018

La nueva etapa que vive Colombia trajo mayor seguridad a los territorios con potencial turístico. Allí, hoy hacen presencia 80.000 militares y unos 41.000 miembros de la Policía Nacional, institución que asignó a 1.100 de sus agentes especializados en turismo para que cumplan labores de vigilancia, prevención de la explotación sexual, control a prestadores de servicios turísticos y de orientación a los viajeros, en 24 departamentos y 15 áreas metropolitanas.

El país nunca antes había recibido a tantos visitantes extranjeros como ahora y, gracias al posconflicto, apunta a convertirse en uno de los destinos turísticos de interés mundial. Las cifras lo corroboran: a diciembre de 2017 se registró el ingreso al país de más de 6,5 millones de extranjeros, lo que equivale a un crecimiento superior al 150 por ciento con respecto a 2010.

Las estadísticas también muestran que desde el año 2015, el turismo le genera más divisas a Colombia que otros renglones tradicionales de la economía como carbón, café, flores y banano. Por ello, el Estado orienta sus esfuerzos en imprimirle dinamismo al sector.

En ese propósito, los ministerios de Defensa y de Comercio, Industria y Turismo suman esfuerzos para impulsar los 12 corredores turísticos emergentes que, confían, recibirán a millones de visitantes nacionales y extranjeros en un futuro cercano. La oportunidad es evidente y la idea es promocionar los sitios complementarios o aledaños a los destinos que han sido tradicionales, así como los segmentos alternativos de avistamiento de aves, la práctica del biciturismo, las rutas patrimonio, los recorridos musicales y gastronómicos y el agroturismo.

Desde los territorios, y con el acompañamiento de la fuerza pública, Colombia se prepara para diseñar rutas de avistamiento de aves, señalización, ordenamiento de playas, ruedas de negocios y proyectos que incluyen miradores, fondas, plazoletas y puntos de información. Las autoridades del sector confían en que el número de empleos directos que genere la actividad turística supere los 1,8 millones de nuevos puestos de trabajo, lo que jalonará la construcción de paz en aquellas regiones que por décadas se mantuvieron marginadas a causa del conflicto.