La gobernación, el Icbf y Cajamag unieron esfuerzos para crear el programa Magdalena Saludable. | Foto: Mauricio Torres

La vía del progreso

Así se está combatiendo la desnutrición infantil en el Magdalena

Cinco mil menores de edad en riesgo de desnutrición fueron identificados el año pasado gracias a un ambicioso programa que busca mejorar las condiciones de salud de las poblaciones más vulnerables del Magdalena.

27 de junio de 2017

Garantizar la atención inmediata a la población infantil y adolescente del departamento, con problemas de salud asociados a la desnutrición, fue el propósito con el que nació el año pasado Magdalena Saludable. Una iniciativa de la Gobernación del Magdalena, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y la Caja Compensación Familiar del Magdalena (Cajamag). José David González, líder del Programa de Infancia y Adolescencia del departamento, ha estado al frente de este plan que, en principio, beneficia a los 12 municipios en los que se registraron los mayores índices de anemia, según cifras obtenidas en años anteriores por el Departamento para la Prosperidad Social.

Una vez identificados estos territorios, se envió a un equipo de trabajo conformado por nutricionistas, auxiliares de enfermería, enfermeros, psicólogos y trabajadores sociales para que evaluaran el estado de cada niño y realizaran un registro detallado.

Durante esta primera fase del programa se realizaron 8.491 valoraciones, gracias a las cuales fue posible identificar 5.000 casos de menores de edad en riesgo de desnutrición, de los cuales 118 recibieron atención médica hospitalaria inmediata, financiada por el programa, debido a la gravedad de su condición.

Después de ser diagnosticados, ingresaron a la segunda fase, que consiste en un proceso de recuperación en el que los especialistas suministran dosis específicas de desparasitante y una ración para 30 días de micronutrientes en polvo, un complemento alimenticio utilizado para potenciar el valor nutricional de la comida casera.

Además de estos dos productos, a cada una de las familias de los niños se les entregó un paquete alimenticio que también incluía avena en hojuelas, leche en polvo entera con hierro, papilla de trigo y miel, papilla de siete granos y Bienestarina. Se tiene proyectada una entrega trimestral. Ya se han efectuado dos. Así mismo, el ICBF otorga otra ración de Binestarina equivalente a 1.800 gramos mensuales por persona.

El presupuesto total destinado a la ejecución de las actividades del programa durante 2016 fue de 675 millones de pesos, dentro de los cuales se incluyen las valoraciones, que se efectúan cada tres meses y permiten llevar un registro detallado de todos los pacientes.

Una vez el menor de edad haya superado el riesgo de desnutrición –de acuerdo con el criterio de los especialistas, que tienen en cuenta variables como la edad, el peso y la talla–, es dado de alta y su lugar como beneficiario del programa es tomado por una nueva persona. Sin embargo, continúa recibiendo las raciones mensuales de Bienestarina.

Para este año, el presupuesto será mayor e incluirá a 17 nuevos municipios. Y es que esta iniciativa es una de las banderas de la administración actual, que ha querido concentrarse en mejorar las condiciones de seguridad alimentaria de las poblaciones más vulnerables, en este caso los niños y adolescentes.

Se espera que el total de beneficiarios llegue a los 11.000 menores de edad y que el programa siga avanzando en los municipios en los que resulta más urgente actuar para saciar el hambre y combatir la desnutrición.urgente actuar para saciar el hambre y combatir la desnutrición.

Sin hambre

El programa Magdalena Saludable identicó, en la primera fase, 5.000 menores de edad que entraron a una etapa de recuperación alimenticia.

Cobertura prioritaria

La primera fase del programa Magdalena Saludable atendió a menores de edad en los municipios de Cerro de San Antonio, Sitionuevo, Concordia, Zona Bananera, Zapayán, Algarrobo, Chibolo, Nueva Granada, Tenerife, San Zenón, Plato y Guamal, así como las comunidades indígenas de Kankawuara.