Durante el periodo comprendido entre 1993 y 2005 en las regiones productoras de crudo disminuyó el índice de pobreza multidimensional. | Foto: DAVID AMADO PINTOR

REGIONES

"A donde llega el petróleo, llega el progreso"

Un estudio de Fedesarrollo estableció que en las regiones colombianas productoras de crudo, los indicadores económicos mejoraron, se redujo la pobreza y se aumentó la cobertura de servicios públicos.

14 de noviembre de 2018

Algunas regiones de Colombia, desde su nacimiento, han estado ligadas al petróleo. Entre ellas se encuentra Barrancabermeja, Santander, uno de los más importantes enclaves de hidrocarburos del país; y departamentos como Arauca, Casanare, Putumayo y Meta, en donde la industria es relativamente más joven.

Norberto Díaz, gerente del campo de producción La Cira Infantas, de Ecopetrol, cuenta que en 1918, cuando empezó la industria petrolera en el país (lo recordamos en la página 130), el hallazgo de crudo a 23 kilómetros del entonces caserío santandereano obligó a la creación de Barrancabermeja, que era una pequeña población que servía como puente entre la zona andina y el Caribe.

Desde entonces, la vida en ‘Barranca Saudita’, como se conocía la ciudad en los tiempos de la bonanza, está amarrada al comportamiento de la industria, tanto así que con la estrepitosa caída de los precios del crudo el municipio santandereano vive hoy la peor crisis de su historia, sin embargo, existe un legado de beneficios y procesos inocultables.

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Para Alexandra Hernández Saravia, vicepresidenta de Asuntos Económicos y Regulatorios de la Asociación Colombiana del Petróleo (ACP), el impacto del sector ha sido positivo en las regiones donde se ha desarrollado. “Así lo demuestran los estudios, el petróleo ha generado e impulsado procesos de desarrollo y de bienestar que han contribuido al progreso del país”.

Una de esas investigaciones, adelantada por la Fundación para la Educación Superior y el Desarrollo (Fedesarrollo), estableció que solo entre 2000 y 2017 la contribución macroeconómica de los hidrocarburos al país estuvo entre el 33 y el 55 por ciento, y la inversión extranjera osciló entre el 11,5 y el 47,9 por ciento.

Según el documento, durante el periodo comprendido entre 1993 y 2005 en las regiones productoras de crudo disminuyó el índice de pobreza multidimensional, que identifica las carencias de los hogares en salud, educación y calidad de vida. En Arauca pasó del 0,99 al 0,71; en Casanare del 0,99 al 0,64; Putumayo tuvo una reducción del 0,98 al 0,84 y en el Meta fue del 0,98 al 0,63. Asimismo, el estudio evidenció que los tres departamentos de la Orinoquia mejoraron de manera sustancial la cobertura del servicio de acueducto, alcantarillado y energía eléctrica.

El sector hidrocarburos ha incentivado la economía en estas zonas desde 1990, por encima del agropecuario y de la suma de otros ingresos. “En los casos estudiados, excepto en Putumayo, mejoraron los indicadores en los últimos 20 años. Sin embargo, a excepción del Meta, se debe fortalecer la competitividad de los departamentos con apoyo gubernamental para cerrar brechas, integrar regiones atrasadas, resolver problemas fronterizos, apoyar la diversificación y la dotación de infraestructura”, concluye el estudio de Fedesarrollo.

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