La separación patrimonial es una de las ventajas de la fiducia en garantía. Esta consiste en que los bienes del patrimonio autónomo que garantizan el crédito están separados de los del deudor. | Foto: Getty

FIDUCIARIA

Conozca cómo respaldar sus créditos

Lo puede hacer con una herramienta financiera llamada fiducia en garantía, impulsada por Fidupopular. Le explicamos cómo funciona y cuáles son sus beneficios para deudores y acreedores.

16 de agosto de 2019

Pocos colombianos acceden a préstamos formales. Según el Foro Económico Mundial Colombia es el tercer país en América Latina con mayor facilidad de acceso a crédito bancario, sin embargo, uno de cada cuatro ciudadanos elige métodos informales de préstamo. Y el sector privado no se queda atrás: de acuerdo con el Instituto Global McKinsey (2018), el 62 por ciento de las pequeñas y medianas empresas del país no tienen acceso a créditos financieros, que son claves para su proyección.

Esta situación se debe, en cierta medida, a que son pocas las herramientas que facilitan el acceso a créditos y al cumplimiento de la deuda. Sin embargo, recientemente se han venido potencializando mecanismos fiduciarios que faciliten la adquisición de créditos y que a su vez garanticen el cumplimiento de las obligaciones crediticias.

Fiduciaria Popular, una filial del Banco Popular que administra 6,9 billones de pesos en activos, se ha puesto en la tarea de fortalecer dos de sus mecanismos: la fiducia en garantía y la fuente de pago con fines de garantía que, gracias a la normatividad existente, han tomado fuerza.

Entre los beneficios de estas herramientas se encuentra la separación patrimonial, es decir, que los bienes patrimonio autónomo que garantizan el crédito están separados de los del deudor. Esto permite que, en caso de insolvencia, no se afecte el pago del crédito.

A su vez, el deudor puede garantizar varios créditos al mismo tiempo y a diferentes acreedores con los mismos bienes, siempre y cuando se respeten los pagos y exista suficiencia de la garantía.

Además, se establecen reglas en caso de incumplimiento, entonces no es necesario acudir a la jurisdicción ordinaria para obtener el pago de la acreencia como sí ocurre tratándose de la hipoteca o la prenda. Finalmente, el flujo de dinero se destina solo para las obligaciones crediticias.

Como explica Juan Felipe Vásquez, presidente de Fiduciaria Popular, “de esta forma apoyamos el crecimiento del sector empresarial del país porque ayudamos a las empresas con el manejo de sus flujos de dinero y sus tesorerías. Además, hacemos posible el apalancamiento de sus operaciones”.