Viviendas para Villavicencio

Según Felipe Suescún Torres, gerente de Villavivienda, en Villavicencio existían proyectos de los años 2003 y 2004 que todavía no se habían terminado. La prioridad del Gobierno fue culminar estas obras y darles un hogar propio a los beneficiarios de estos programas.

De 2016 a la fecha, el gobierno municipal ha construido y entregado 4.771 viviendas de interés social nuevas, distribuidas en cuatro proyectos que recibió inconclusos. En la urbanización San Antonio se beneficiaron 958 familias que esperaron 16 años para recibir sus viviendas, mientras que en la ciudadela La Madrid se entregaron 1.874 casas nuevas; en la urbanización Betty Camacho otras 1.322 y en la urbanización Pinares de Oriente 617 viviendas.

Así mismo, se puso en marcha el programa de vivienda en el sector rural, que llegó a 56 de las 77 veredas que componen el municipio. Esta iniciativa consistió en construir 127 casas nuevas y llevar a cabo 221 mejoramientos. También se logró la reubicación de aproximadamente 330 familias que vivían en las orillas de los ríos, o a las cuales el invierno les había destruido sus hogares.

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Los beneficiarios, tanto de vivienda nueva como de mejoramiento, fueron elegidos en convocatorias realizadas por Villavivienda con el apoyo de la Secretaría de Competitividad. Solo en 2018, la inversión del proyecto de vivienda rural fue de casi 3.000 millones de pesos, que beneficia a 216 familias distribuidas en los siete corregimientos del municipio.

Otro proyecto que ejecuta el goberno municipal es el de Viviendas de Interés Prioritario para Ahorradores (Vipa), en el que, de la mano del Ministerio de Vivienda, se construyen 1.000 viviendas que benefician a personas en condición de discapacidad, madres comunitarias, mujeres y hombres cabeza de hogar, víctimas del conflicto, población indígena y comunidad LGBTI, entre otros.

El proyecto Vipa, sin embargo, no se ha limitado a la construcción de las 1.000 viviendas, ya que la administración municipal se ha preocupado por desarrollar infraestructura dotacional y de urbanismo, con el propósito de propiciar mejores condiciones de vida a los residentes y dignificar cada vez más la construcción de sus proyectos de vida. Así se construyó una planta de tratamiento que garantizó el suministro continuo de agua potable las 24 horas y se mejoran las vías internas y de acceso al proyecto habitacional. Además, con una inversión de 16.000 millones de pesos están en construcción un megacolegio, un Centro de Desarrollo Infantil (CDI) y un parque lineal y antes de concluir 2019 se iniciará la ejecución de un polideportivo.

El reto no termina acá

Aunque los números no mienten y en materia de vivienda los resultados han sido positivos, el reto no ha terminado. Según Felipe Suescún, la intención es aprovechar el cierre de gobierno para adelantar los trámites necesarios con el Ministerio de Vivienda y dejar trazado el camino para el gobierno que venga. “Queremos dejar las bases para que Villavicencio siga siendo una ciudad de propietarios”, afirma.