Gerd Leonahrd tiene más de 25 años de experiencia en tecnología y en el negocio del entretenimiento. | Foto: Istock

FUTURO

“La cultura siempre le gana a la tecnología”

Así lo asegura el futurista y experto en tecnología, Gerd Leonhard, quien habla en esta entrevista sobre la relación entre humanos y máquinas en los lugares de trabajo.

1 de noviembre de 2019

SEMANA: ¿Cómo se pueden humanizar los procesos técnicos en lugares como los puertos?

GERD LEONHARD: Tienen que saber que las máquinas no pueden hacer todo mejor; solo pueden hacer cosas que no requieran de humanos. Por ejemplo, si usted está operando un puerto, las máquinas pueden ser mejores para muchas cosas, pero si hay un conflicto laboral o una negociación de impuestos, una máquina no lo puede hacer. En ese sentido, humanizar significa usar la tecnología y poner lo humano en un nivel más importante.

Usted puede tener más robots, pero los robots tendrán que ser programados y este es un nuevo trabajo para los humanos. Creo que sería un error obligar a las industrias a deshumanizarse o sacar a los humanos de los procesos.

SEMANA: ¿Cómo se puede evitar el miedo de perder empleos por la automatización?

G.L.: Los trabajos no están siendo automatizados, solo algunas labores. Si usted es un conductor de camión, a lo mejor, la parte de manejo puede ser automatizada, pero usted debe seguir en el camión manejando el sistema y haciendo cambios en la ruta. Creo que los medios han exagerado la idea de que con automatización nadie tendrá trabajo. Entonces, creo que el miedo a la automatización está en cada uno, y nuestra respuesta debe ser formarnos para ser mejores que las máquinas.

SEMANA: Entonces, ¿qué consejo le daría a una industria como la de los puertos para usar la tecnología de la mejor manera?

G.L.: Es muy importante mirar todas las tendencias como el Internet de las Cosas, el Cloud Computing o la Inteligencia Artificial y educarse para evaluarlas y así poder hacer un buen juicio de lo que es bueno y lo que es malo. Hay que estar abierto a la tecnología y hacer preguntas críticas.

Pienso que la idea de la Inteligencia Artificial es como una varita mágica: a veces nos olvidamos de que es una herramienta y las herramientas se pueden romper. La tecnología comete errores y las máquinas también. Estas pueden crear nuevos errores como malentendidos, parcialidad y desinformación. Debemos usar la tecnología para crear lo mejor que podamos. Pero siempre debemos ser críticos frente a ella.

SEMANA: ¿Es más fácil para las industrias creativas conciliar tecnología y humanidad?

G.L.: Lo primero es que estamos viviendo en un tiempo donde la gente cree que la ingeniería o la programación son las cosas más importantes. Pero no, porque un programa de ingeniería es algo que los computadores pueden aprender y pueden ser mejores en su lógica de lo que somos nosotros. Así que debemos entender que nuestro valor está en ir más allá del trabajo de una máquina.

La habilidad número uno de los seres humanos es la inteligencia emocional, que es básicamente entender a las personas. Yo siempre digo “la cultura se come a la tecnología al desayuno”. La cultura siempre le gana a la tecnología. El éxito no solo está en la tecnología.

SEMANA: ¿Cómo le aconsejaría a un experto en STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) que desarrolle su inteligencia emocional?

G.L.: Si es un genio en la ciencia de los datos la gente lo perdonará por no tener ciertas habilidades emocionales. Pero, si usted no es un genio, tendrá que trabajar en otras habilidades. Las personas que son buenas con otros son los que usualmente avanzan.

Lo que quiero decir es que hay personas que son científicos brillantes y sus empleadores los van a dejar porque le ganan a todo el mundo y eso es un caso particular. Es como la diferencia entre un músico de jazz y Jimi Hendrix. Si usted es Jimi Hendrix no necesita otras habilidades. Pero la mayoría de personas no son así, por eso creo que es tan importante diversificar lo que somos y la creatividad es una parte muy importante de eso, es algo que no se aprende en una escuela de negocios. Se aprende en la vida.

SEMANA: ¿Cómo se pueden proveer herramientas para desarrollar la creatividad en un lugar de trabajo?

G.L.: Esto debe venir del liderazgo de la compañía. Es clave dejar que las personas expresen sus propias ideas, dejarlos trabajar juntos para crear nuevas cosas, tener lluvias de ideas, experimentar y aceptar nuevos riesgos, estar dispuestos a fallar. Esto es muy importante. Si esto viene de un alto nivel de mando, nadie se asustará.

Por eso es que los americanos son tan rápidos con la innovación porque tienen una actitud de cuestionar todo. Entonces, ¿cómo se abre la cultura? Las gerencias o los altos mandos no solo deben querer que todo funcione. Siempre he dicho que usar la definición de KPI (Key Performance Index) está totalmente relacionado con la sociedad industrial. Y ya no somos una sociedad industrial con la economía del conocimiento. Por lo tanto, deberíamos usar los Indicadores humanos clave (KHI) que miden las habilidades solo para humanos.

SEMANA: ¿Nos da un ejemplo de una compañía que logró que lo humano y la tecnología trabajaran de la mano?

G.L.: Hay muchos buenos ejemplos. Me impresiona mucho lo que ha hecho Mercedes-Benz: de ser una compañía de ingeniería a ser una compañía de plataformas. Y es que lo común es cambiar. Cuando vas a un terapeuta con tu esposa y el terapeuta te dice las cosas que podrías cambiar, luego debes tomar una decisión: si vas a recibir el cambio o no. Este no es un proceso fácil.